Paxlovid de Pfizer, el medicamento oral de la empresa para tratar el COVID-19, recibió el domingo la autorización de emergencia del Ministerio de Sanidad.
El Estado ha pedido decenas de miles de dosis para ayudarle a combatir la ola de la variante Ómicron. Se supone que llegarán a Israel a partir del miércoles.
Paxlovid, que recibió la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. el pasado miércoles, es el primer tratamiento casero del mundo para el virus. Inhibe la actividad de la enzima proteasa, necesaria en el proceso de replicación del virus en el organismo.
El fármaco, que se administra en forma de comprimidos, está pensado para que lo tomen los pacientes en estado leve o moderado en los tres primeros días de aparición de los síntomas. El tratamiento se realiza una vez cada 12 horas durante cinco días.
Paxlovid recibió la aprobación de la FDA tras demostrar en un ensayo clínico de fase II/III que reduce la gravedad de la enfermedad, la hospitalización y la muerte en un 89% cuando los pacientes reciben un tratamiento temprano.
Según los datos de Pfizer, la eficacia de la píldora no debería verse alterada por las variantes, incluida la variante Ómicron.
El primer ministro Naftali Bennett dijo el mes pasado que había firmado un acuerdo con Pfizer, que también ha suministrado a Israel millones de vacunas contra el coronavirus, para obtener la píldora tan pronto como recibiera la aprobación de la FDA.
Se espera que el Paxlovid y el Molnupiravir de Merck, miles de dosis que también están de camino al país, desempeñen un papel clave en la lucha contra la quinta ola en Israel.