MyndLift y Sheba Medical Center usan sensores EMG para mejorar control motor en pacientes con lesiones medulares, con resultados prometedores en 2022.
MyndLift lidera innovación en biofeedback desde Tel Aviv
MyndLift, una empresa con sede en Tel Aviv, lanzó en 2020 un sistema de biofeedback que utiliza sensores de electromiografía (EMG) para medir la actividad muscular y proporcionar retroalimentación visual en tiempo real. Este dispositivo permite a los pacientes con lesiones medulares realizar ejercicios guiados que mejoran el control motor. Implementado en el Centro Médico Sheba, uno de los principales hospitales de Israel, el sistema ha demostrado resultados significativos en la rehabilitación neuromuscular. Un estudio publicado en 2022 por el centro reportó un aumento del 20% en la activación muscular tras seis semanas de uso en pacientes con lesiones medulares parciales. La tecnología se basa en la conversión de señales mioeléctricas en datos visuales, lo que ayuda a los pacientes a ajustar sus movimientos de manera precisa.
El sistema de MyndLift emplea electrodos de superficie colocados en la piel para detectar cambios en la actividad de los músculos esqueléticos. Estas señales se transforman en gráficos o indicadores visuales que los pacientes observan en una pantalla, lo que les permite corregir patrones de movimiento en tiempo real. La retroalimentación visual fomenta la reeducación neuromuscular, un proceso clave para recuperar la funcionalidad en extremidades afectadas por lesiones medulares o trastornos neurológicos. El Centro Médico Sheba, ubicado en Ramat Gan, integró esta tecnología en su programa de rehabilitación, enfocándose en pacientes con parálisis parcial y secuelas de accidentes cerebrovasculares. Los terapeutas del centro destacan la facilidad de uso del sistema y su capacidad para personalizar los ejercicios según las necesidades de cada paciente.
El estudio de 2022, realizado con 30 pacientes en Sheba, evaluó la eficacia del biofeedback EMG en comparación con terapias tradicionales. Los participantes, con edades entre 25 y 60 años, realizaron sesiones de 30 minutos, cinco veces por semana. Los resultados mostraron que el grupo que utilizó el sistema de MyndLift logró una mejora significativa en la fuerza muscular y la coordinación en comparación con el grupo de control, que siguió un programa de ejercicios sin retroalimentación. Los investigadores señalaron que el 80% de los pacientes reportaron una mayor confianza en sus movimientos tras completar el programa. Además, el estudio destacó una reducción del 15% en el tiempo necesario para alcanzar hitos funcionales, como sostener objetos o caminar con asistencia.
La tecnología de biofeedback no es nueva, pero los avances de MyndLift han optimizado su aplicación en entornos clínicos. Los sensores EMG de última generación ofrecen una mayor sensibilidad y un diseño compacto, lo que facilita su uso en hospitales y clínicas. El sistema también incorpora algoritmos de inteligencia artificial que analizan los datos musculares y sugieren ajustes personalizados para maximizar los resultados. En Israel, donde la innovación tecnológica en salud es un pilar estratégico, esta solución ha atraído la atención de instituciones médicas y empresas de biotecnología interesadas en expandir su uso a otras condiciones, como la esclerosis múltiple y la enfermedad de Parkinson.
Datos clave sobre biofeedback en rehabilitación neuromuscular
- Tecnología EMG: Mide señales eléctricas de músculos para retroalimentación visual en tiempo real.
- Mejora muscular: Estudio de Sheba en 2022 reportó un aumento del 20% en activación tras seis semanas.
- Aplicaciones: Lesiones medulares, accidentes cerebrovasculares, esclerosis múltiple y Parkinson.
- Innovación israelí: MyndLift, fundada en 2014, lidera el desarrollo de biofeedback en Tel Aviv.
- Implementación: Centro Médico Sheba integra el sistema en programas de rehabilitación desde 2020.
Sheba Medical Center pionero en rehabilitación avanzada

El Centro Médico Sheba ha consolidado su posición como líder en la adopción de tecnologías avanzadas para la rehabilitación. Además del sistema de MyndLift, el hospital utiliza otras herramientas de biofeedback, como la ecografía en tiempo real (RTUS), para tratar condiciones musculoesqueléticas. Sin embargo, el biofeedback EMG destaca por su capacidad para abordar trastornos neurológicos complejos. Desde 2020, el centro ha capacitado a más de 50 terapeutas en el uso del sistema, lo que ha permitido escalar su aplicación a un mayor número de pacientes. El hospital también colabora con universidades israelíes, como la Universidad de Tel Aviv, para investigar nuevas aplicaciones del biofeedback en neurorehabilitación.
El impacto del biofeedback EMG trasciende las lesiones medulares. En Sheba, los médicos han comenzado a explorar su uso en pacientes con accidentes cerebrovasculares, donde la reeducación muscular es fundamental para recuperar la movilidad. Un ensayo clínico iniciado en 2023 evalúa la eficacia del sistema en 40 pacientes con hemiplejía, con resultados preliminares que indican mejoras en la función de las extremidades superiores. Asimismo, el sistema se ha adaptado para tratar a niños con parálisis cerebral, utilizando interfaces visuales gamificadas que hacen las sesiones más atractivas. Estos avances reflejan el compromiso de Israel con la innovación médica, apoyado por un ecosistema de startups y centros de investigación de vanguardia.
La historia del biofeedback en rehabilitación se remonta a la década de 1960, cuando se utilizó por primera vez para tratar trastornos neuromusculares en Estados Unidos. Inicialmente, los dispositivos eran voluminosos y limitados a entornos de laboratorio. La introducción de electrodos de superficie en los años 80 mejoró la accesibilidad, pero fue la digitalización en los 2000 lo que permitió el desarrollo de sistemas compactos y precisos. En este contexto, Israel ha jugado un papel clave en los últimos años, con empresas como MyndLift impulsando la próxima generación de dispositivos. El país invierte aproximadamente el 5% de su PIB en investigación y desarrollo, lo que ha posicionado a Tel Aviv como un centro global de tecnología médica.
El enfoque en biofeedback también responde a una creciente demanda de terapias no invasivas. A diferencia de la estimulación eléctrica funcional, que puede resultar incómoda para algunos pacientes, el biofeedback EMG es bien tolerado y no requiere procedimientos invasivos. En el Centro Médico Sheba, los pacientes han reportado una mayor satisfacción con las sesiones de biofeedback en comparación con otras terapias, según encuestas internas realizadas en 2021. Este factor, combinado con los resultados clínicos, ha llevado a planes para expandir el programa a otros hospitales en Israel, como el Hospital Hadassah en Jerusalén.
Israel consolida su liderazgo en tecnología médica
El éxito de MyndLift y el Centro Médico Sheba es parte de un esfuerzo más amplio por posicionar a Israel como líder en tecnología médica. El país cuenta con más de 1,500 startups en el sector de la salud, muchas de las cuales se especializan en dispositivos médicos y software de inteligencia artificial. En 2023, el gobierno israelí anunció una inversión de 100 millones de shekels para apoyar proyectos de innovación en salud, incluyendo tecnologías de rehabilitación. Esta financiación ha permitido a empresas como MyndLift acelerar el desarrollo de nuevos productos y expandir su presencia internacional.
En el ámbito global, el biofeedback EMG ha ganado reconocimiento como una herramienta eficaz para la rehabilitación. Estudios internacionales, como uno publicado en 2021 por la Universidad de Stanford, confirman que la retroalimentación visual mejora los resultados en pacientes con trastornos neuromusculares. Sin embargo, los sistemas desarrollados en Israel destacan por su integración de inteligencia artificial y su enfoque en la personalización. Por ejemplo, el software de MyndLift permite a los terapeutas ajustar los parámetros de retroalimentación en función de los progresos diarios de cada paciente, una característica que no está presente en muchos sistemas comerciales.
El Centro Médico Sheba también ha establecido colaboraciones internacionales para promover el biofeedback. En 2022, firmó un acuerdo con el Massachusetts general Hospital para intercambiar datos y protocolos de rehabilitación. Esta alianza ha permitido a Sheba acceder a investigaciones de vanguardia y compartir sus hallazgos sobre el biofeedback EMG. Además, el hospital organiza conferencias anuales que reúnen a expertos en neurorehabilitación, consolidando su reputación como un centro de excelencia en este campo.
Mientras Israel continúa invirtiendo en tecnología médica, el biofeedback EMG se perfila como una solución prometedora para abordar los desafíos de la rehabilitación neuromuscular. Con empresas como MyndLift y centros como Sheba a la vanguardia, el país está sentando las bases para transformar la atención médica a nivel global. La combinación de innovación tecnológica, investigación clínica y un enfoque centrado en el paciente asegura que el biofeedback siga evolucionando como una herramienta clave en la recuperación funcional.