Dubái, en los Emiratos Árabes Unidos (EAU), está creando su propia lluvia utilizando tecnología de drones que disparan nubes en un intento de hacer frente a una ola de calor en la ciudad que supera regularmente los 122 grados.
Dubái se está viendo empapada por fuertes aguaceros causados en parte por drones que hacen estallar las nubes con carga eléctrica para producir lluvia, según un informe de Daily Mail.
La tecnología de los drones es capaz de crear precipitaciones dando a las nubes una descarga eléctrica que las impulsa a agruparse y producir lluvia, añade el informe.
El Centro Nacional de Meteorología (NCM) de los Emiratos Árabes Unidos publicó recientemente un vídeo en el que se ven aguaceros que empapan por completo las carreteras y que, en algunos casos, parecen dificultar la circulación de los conductores entre las aguas torrenciales que fluyen por las calles.
Las operaciones forman parte de una misión de 15 millones de dólares para generar lluvia en los Emiratos Árabes Unidos, que se encuentran entre los 10 países más secos del mundo, con una media de precipitaciones de apenas 5 centímetros al año, informa Daily Mail.
El profesor de la Universidad de Reading Maarten Ambaum, que ha estado trabajando en uno de los proyectos de observación de nubes en los EAU, declaró a la BBC a principios de este año que el país tiene “muchas nubes” para crear las condiciones que permitan las precipitaciones.
Ambaum explicó que el plan consiste en conseguir que las gotas de agua de las nubes se fusionen y se peguen entre sí, “como el pelo seco a un peine” cuando se encuentra con la electricidad estática.
“Cuando las gotas se fusionen y sean lo suficientemente grandes, caerán en forma de lluvia”, dijo.
Otro proyecto para crear lluvia consiste en lanzar misiles de sal a las nubes desde aviones.
“Es fantástico”, dijo Mark Newman, piloto jefe adjunto del NCMS. “En cuanto llueve, hay mucho entusiasmo. Podemos oír que los chicos de la oficina están contentos”.
Sin embargo, según Newman, no todas las nubes a las que se apunta acaban produciendo precipitaciones.
Al parecer, los Emiratos Árabes Unidos también están estudiando la forma de conservar la lluvia generada por la “siembra de nubes”, en lugar de dejar que se evapore o desemboque en el mar. Por ello, el país ha construido presas y embalses para recoger el agua.
“No queremos desperdiciar ni una gota de agua”, dijo el director ejecutivo del NCMS, Abdulla al-Mandoos.