¡Mazal tov! Una nidada de 46 tortugas bobas nació el jueves en la reserva natural de Rosh Hanikra, en la costa norte de Israel.
La eclosión fue supervisada por voluntarios de la Autoridad de Parques y Naturaleza de Israel y por el guardabosques Manor Guri, que se aseguró de que las tortuguitas llegaran a salvo al mar.
La eclosión del jueves marcó el final de la temporada de apareamiento, que comenzó en mayo. Las tortugas marinas preñadas salen del mar por la noche y ponen grupos de 70 a 140 huevos, que entierran. Las crías tardan unos dos meses en nacer.
Los investigadores han aprendido que la luz artificial de los locales de eventos junto al mar, los restaurantes y el paseo marítimo puede confundir a las crías y hacer que se alejen del mar en lugar de acercarse a él.
Las tortugas bobas, comunes en la costa de Israel, están en peligro de extinción. Las crías pesan entre 15 y 40 gramos (de media onza a 1,5 onzas), mientras que los adultos pesan una media de 90 kg. (198 libras). La mayoría de las tortugas bobas viven más de 30 años, y algunas pueden llegar a los 50.