Tras 491 días de cautiverio en Gaza, Or Levy, Eli Sharabi y Ohad Ben Ami fueron liberados. Ahora, deben afrontar secuelas psicológicas y un largo proceso de rehabilitación.
Secuelas del cautiverio en los rehenes liberados
Los tres rehenes israelíes liberados la semana pasada, Or Levy, Eli Sharabi y Ohad Ben Ami, recuperaron su libertad luego de pasar 491 días en manos de Hamás. Visiblemente afectados, ahora deben enfrentar un proceso de recuperación tanto física como emocional.
El Dr. Danny Brom, director fundador de Metiv, el Centro de Psicotrauma de Israel, declaró a The Times of Israel que, aunque el trauma es superable, su impacto puede ser profundo. “La resiliencia es la capacidad de recuperación tras el sufrimiento”, afirmó.
Un estudio de la profesora Zahava Solomon, de la Universidad de Tel Aviv, y la profesora Rachel Dekel, de la Universidad Bar-Ilan, concluyó que el cautiverio provoca secuelas psicológicas, somáticas y funcionales de larga duración. Esta investigación, publicada en el Journal of Clinical Psychiatry, analizó casos de ex prisioneros de guerra de la Guerra de Yom Kippur de 1973.
El impacto personal de los rehenes liberados
Para algunos rehenes liberados, el regreso ha estado marcado por tragedias personales. Eli Sharabi perdió a su esposa y sus dos hijas adolescentes el 7 de octubre, al igual que Or Levy, cuya esposa fue asesinada durante el ataque de Hamás. Otros han regresado a hogares destruidos, lo que complica aún más su recuperación.
Pese a ello, Brom destacó que muchas víctimas del Holocausto no desarrollaron trastornos psicológicos graves. “No olvidan, pero en su mayoría logran seguir adelante con el recuerdo y el dolor”, señaló.
Datos clave sobre los rehenes y la guerra
- El 7 de octubre de 2023, unos 3.000 terroristas de Hamás atacaron Israel, matando a aproximadamente 1.200 personas.
- En ese ataque, 251 personas fueron secuestradas. Actualmente, 73 siguen en Gaza, incluyendo 34 cuyos cuerpos han sido confirmados como muertos por las FDI.
- Hamás ha liberado hasta ahora a 16 rehenes bajo un acuerdo de alto el fuego iniciado en enero, a cambio de cientos de terroristas presos palestinos.
- En un acuerdo separado, el grupo también liberó a cinco ciudadanos tailandeses secuestrados el 7 de octubre.
Asistencia médica y psicológica para los rehenes
El Ministerio de Salud ha asegurado que los hospitales están preparados para brindar apoyo médico y psicológico a los rehenes liberados. Sin embargo, Eyal Calderón, primo de Ofer Calderón (rehén durante 484 días), advirtió a Ynet que el proceso de rehabilitación será extenso y con altibajos.
Medios hebreos informaron que Levy, Sharabi y Ben Ami sufrieron abusos físicos y psicológicos durante su cautiverio, según los testimonios de sus familiares.
A pesar de las dificultades, el Dr. Alan Flashman, especialista en salud mental, advirtió sobre los riesgos de especular públicamente sobre la salud psicológica de los rehenes, ya que esto podría afectar su recuperación.
Apoyo internacional para víctimas de secuestro
El Ejército de EE. UU. gestiona el programa PISA, diseñado para ayudar a ex rehenes y víctimas de secuestro a recuperarse tras periodos de aislamiento. Entre los beneficiarios de este programa se encuentra Evan Gershkovich, periodista del Wall Street Journal, detenido en Rusia durante más de un año por cargos de espionaje.
El programa, de 10 días y realizado en el Centro Médico del Ejército Brooke en Texas, resalta la importancia de brindar a los ex prisioneros un tiempo adecuado para estabilizarse psicológicamente antes de retomar su vida normal.
Consecuencias del cautiverio y el impacto en los rehenes
Or Levy, Eli Sharabi y Ohad Ben Ami, liberados la semana pasada en el marco del alto el fuego, quedaron marcados por el prolongado encierro. Sus familiares han descrito signos visibles de sufrimiento y desnutrición.
El Dr. Danny Brom, director fundador de Metiv, el Centro de Psicotrauma de Israel, explicó que el proceso de recuperación será complejo. “El trauma puede superarse; la resiliencia es la capacidad de recuperación tras el sufrimiento”, afirmó.
Un estudio dirigido por Zahava Solomon y Rachel Dekel analizó las secuelas en ex prisioneros de guerra de la Guerra de Yom Kippur de 1973. La investigación, publicada en el Journal of Clinical Psychiatry, concluyó que el cautiverio provoca efectos psicológicos, físicos y funcionales duraderos.
“Los ex prisioneros de guerra cargan con sus heridas durante mucho tiempo”, escribió Solomon en sus conclusiones.
Impacto personal y familiar tras la liberación
Varios de los rehenes liberados regresaron a situaciones devastadoras. La esposa de Eli Sharabi y sus dos hijas adolescentes fueron asesinadas el 7 de octubre, al igual que la esposa de Or Levy. Otros encontraron sus hogares destruidos.
A pesar de las adversidades, Brom mencionó que muchas víctimas del Holocausto lograron continuar con sus vidas sin desarrollar patologías severas. “No olvidan, pero en su mayoría logran seguir adelante con el recuerdo y el dolor”, afirmó.
Estos rehenes formaban parte de los 251 secuestrados el 7 de octubre de 2023, cuando alrededor de 3.000 terroristas de Hamás atacaron Israel, matando a unas 1.200 personas e iniciando la guerra en Gaza.
Datos clave sobre los rehenes y la situación actual
- 73 rehenes siguen en Gaza, incluyendo 34 cuyos cuerpos han sido confirmados como muertos por las FDI.
- Hamás liberó hasta ahora 16 rehenes durante el alto el fuego iniciado en enero.
- En un acuerdo paralelo, cinco ciudadanos tailandeses secuestrados el 7 de octubre también fueron liberados.
- El Ministerio de Salud ha preparado hospitales para brindar atención médica y apoyo psicológico a los rehenes.
- Familiares de los rehenes denuncian abusos físicos y psicológicos durante el cautiverio.
Riesgos psicológicos y proceso de rehabilitación
El proceso de rehabilitación será prolongado y con altibajos, advirtió Eyal Calderón, primo de un rehén liberado. Según expertos, la salud mental de los secuestrados puede verse gravemente afectada por el aislamiento, el maltrato y la incertidumbre.
El Dr. Alan Flashman, especialista en salud mental, advirtió sobre el peligro de especular sobre el estado emocional de los liberados. “Es invasivo y perjudicial”, señaló.
Para ayudar en la recuperación, el Ejército de EE. UU. cuenta con el programa PISA, destinado a ex rehenes y víctimas de secuestro. Este programa de 10 días en el Centro Médico del Ejército Brooke en Texas permite a los liberados descomprimirse psicológicamente.
El impacto a largo plazo y las dificultades emocionales
Un manual del Estado Mayor Conjunto de EE. UU., compartido con The Times of Israel, recomienda que los ex rehenes procesen su experiencia de manera natural y eviten la exposición inmediata a eventos mediáticos o políticos.
Tamar Lavi, directora de investigación del Centro de Trauma y Resiliencia de Israel (NATAL), advierte que el estrés postraumático puede manifestarse con el tiempo. Explicó que los rehenes experimentan un período inicial de inestabilidad, alternando entre la alegría y la angustia.
Algunos rehenes también sufren por los que siguen cautivos. Or Levy confesó a su familia que, antes de su liberación, pidió que otro rehén fuera liberado en su lugar.
Secuelas del cautiverio en la salud mental de los rehenes
Los estudios de Solomon y Dekel sobre ex prisioneros de guerra demostraron que el cautiverio genera un daño psicológico más severo que el combate. “La tortura, la humillación y el aislamiento son inherentes al cautiverio”, escribieron.
El caso de Yarden Bibas ejemplifica esta realidad. Durante sus 484 días en Gaza, los terroristas lo atormentaron con información sobre su esposa e hijos.
Según testimonios recogidos por medios hebreos, los captores de Romi Gonen se burlaban de su herida abierta cuando la llevaron a Gaza. Asimismo, Or Levy relató que, antes de su liberación, sus captores obligaron a varios rehenes a desfilar ante terroristas que los vitoreaban.
El profesor Hagai Levine, jefe del equipo de salud del Hostages and Missing Families Forum, explicó que el aislamiento prolongado y el miedo constante pueden derivar en ansiedad, depresión y trastorno de estrés postraumático (TEPT).
El TEPT es una afección difícil de tratar y sus síntomas incluyen recuerdos intrusivos, pesadillas y ansiedad extrema. En los secuestrados en Gaza, su impacto puede ser aún más severo debido a la prolongada tortura y el encierro.
El profesor Yair Bar-Haim, director del Centro Nacional de Estrés Traumático y Resiliencia, destacó que cada persona reacciona de manera diferente a estas experiencias. “No todos son iguales, ni tienen la misma personalidad o el mismo trauma”, señaló.
A pesar de las diferencias individuales, Tamar Lavi concluyó que los rehenes vivirán con las secuelas de su cautiverio durante toda su vida.