Rusia planea enviar una nave espacial sin tripulación a la Estación Espacial Internacional para traer de vuelta a la Tierra a dos cosmonautas rusos y a un astronauta estadounidense que quedaron varados allí, informó el viernes NPR.
Según el informe, los cosmonautas de Roscosmos Sergey Prokopyev y Dmitri Petelin y el astronauta de la NASA Frank Rubio llegaron a la ISS en septiembre en la Soyuz MS-22.
Sin embargo, el 14 de diciembre se detectó una fuga de refrigerante externo en la nave rusa, lo que la inutilizó para una misión de retorno estándar y dejó varados a Prokopyev, Petelin y Rubio.
Causa de la fuga
La fuga se debió probablemente a la colisión de un pequeño meteoroide con el radiador de la MS-22, según declaró Sergei Krikalev, director de programas de vuelos espaciales tripulados de Roscosmos, según The Guardian.
The Guardian señaló que los micrometeoroides —que viajan a velocidades de unas 17.000 mph (27.400 km/h)—, junto con la basura espacial procedente de las pruebas de misiles antisatélites, constituyen una amenaza para los vuelos espaciales tripulados.
Las autoridades rusas y estadounidenses tenían previsto lanzar el domingo una nave Soyuz MS-23 sin tripulación a la estación espacial. Sin embargo, se descubrió una fuga de refrigerante en otra nave de la estación, el carguero ruso Progress 82, añadió el informe de NPR.
Se espera que la nave de rescate llegue a la ISS el domingo
Debido a la fuga en la Progress 82, el lanzamiento de la MS-23 se pospuso hasta el viernes. Se espera que la nave llegue a la ISS el domingo, donde entregará una carga útil de 948 libras.
Prokopyev, Petelin y Rubio regresarán a la Tierra en la MS-23 en septiembre.
La MS-22 dañada será devuelta a la Tierra para que los ingenieros puedan estudiarla.