Vivir en un entorno urbano junto con gatos sin hogar afectó el peso de los erizos en determinadas zonas del país. Los mamíferos espinosos se acostumbraron a comer fácilmente compartiendo la comida en los lugares urbanos donde son alimentados los felinos por la buena voluntad de los vecinos del barrio.
Los erizos normalmente logran su sustento persiguiendo insectos y caracoles. El hospital veterinario determinó que hay un aumento en el número de estos animalitos que sufren sobrepeso y decidieron ayudarlos a adelgazar para luego devolverlos a la naturaleza.
El erizo promedio sale a buscar comida principalmente por la noche y es considerado el mejor amigo del jardinero principalmente en el entorno urbano. Come muchos insectos que dañan plantas, artrópodos, caracoles y anfibios, reptiles y pequeños roedores.
El hospital veterinario del Safari de Ramat Gan trata anualmente a erizos heridos y enfermos, y manifiestan que hay un aumento constante en la proporción de erizos en necesidad de tratamiento. Los machos alcanzan un peso promedio de 650 a 850 gramos y las hembras a 530 gramos.
Uno de los ejemplos de obesidad entre animales salvajes es un paciente extremadamente espinoso llamado Sherman. El erizo adulto fue llevado al hospital por ciudadanos después de verlo teniendo problemas para caminar. La sospecha de una lesión cambió rápidamente a la preocupación por un exceso de peso peligroso. Sherman fue pesado y se encontró que pesaba 2,700 kgs.
En los últimos años, los erizos han sufrido cambios en la dieta debido a la proximidad humana. Con el aumento en el número de gatos que viven en las calles y en la alimentación los erizos encontraron una fuente de alimento disponible y de fácil acceso.
Por otra parte, los erizos que viven en las ciudades encuentran muchas dificultades a raíz de las construcciones y a la falta de arbustos y plantas en las zonas públicas y privadas. El follaje de arbustos bajos es esencial para la existencia de estos animales, la falta de ellos reduce el acceso a los alimentos y al agua y las rutas son un medio de accidentes continúo. Además, también sufren de envenenamientos por los pesticidas esparcidos en jardines y patios.
El problema del sobrepeso en estas criaturas también constituye un grave riesgo en la defensa contra otros animales, dado que les impide escapar con facilidad en busca de un refugio apropiado.
Algunos de los erizos que ya fueron recuperados del problema de sobrepeso fueron devueltos a la esquina de los niños en el Safari.
Si bien en la mayoría de los casos, los cuidadores necesitan ayudar a los animales salvajes a elevar su peso antes del retorno a la naturaleza, en este caso, deben tener cuidado con la cantidad de alimento que se les da.
Al principio, Sherman fue llevado al patio con otro erizo, pero en vista de su hábito de comer grandes cantidades de comida, también se comía la comida del otro erizo. Ahora Sherman comparte su hogar temporal con las tortugas, comiendo lechuga junto con ellas, pero también carne molida, que se le proporciona en porciones medidas.
Fuente: aurora-israel.co.il