En la residencia del último sospechoso detenido por el intento frustrado de atentado contra los conciertos de Taylor Swift en Austria, las autoridades hallaron material relacionado con el grupo Estado Islámico y Al Qaeda.
Los conciertos han sido cancelados. El ministro del Interior, Gerhard Karner, informó desde Viena que no se buscan más sospechosos tras la detención de ambos individuos.
“La situación era y sigue siendo grave, pero podemos decir que se evitó una tragedia”, declaró Karner.
El segundo sospechoso, un joven austríaco de 17 años con ascendencia turca y croata, fue arrestado por fuerzas especiales cerca del estadio donde se realizarían los conciertos. Otro sospechoso, un joven de 19 años, también fue detenido. Los nombres no fueron revelados conforme a las normas de privacidad austriacas.
Las autoridades austriacas indicaron que los dos jóvenes planeaban un ataque fuera del estadio, pretendiendo causar el mayor número de víctimas posible con cuchillos o explosivos caseros.
En una conferencia de prensa en Viena, se reveló que el principal sospechoso, un austríaco de 19 años con raíces en Macedonia del Norte, confesó plenamente sus planes.
Según los informes, estaba “claramente radicalizado hacia el Estado Islámico y creía que era correcto matar a los infieles”.
El segundo sospechoso había sido recientemente contratado por una empresa de servicios en el recinto de los conciertos. Los investigadores encontraron en su hogar una considerable cantidad de material relacionado con el Estado Islámico y Al Qaeda.
Las cancelaciones de tres conciertos con entradas agotadas devastaron a los seguidores de Taylor Swift, quienes habían invertido miles de euros en viajes y alojamiento en Viena para asistir al Eras Tour.
El Estadio Ernst Happel, que debía albergar los conciertos jueves, viernes y sábado, estaba vacío la mañana del jueves, con solo la presencia de medios de comunicación en el exterior.