El gobernador de San Pablo, Marcio Franca, dio la bienvenida al jeque Bilal Mohsen Wehbe, miembro Hezbolá, durante su visita a la sede del gobierno estatal el 17 de abril. El hecho fue revelado en la edición de la revista “Veja” el día sábado, seguido de una declaración de condena publicado por la Federación Judía de San Pablo el domingo.
“Desafortunadamente, el gobernador Marcio Franca y su equipo ignoraron los vínculos de la organización con el contrabando y el narcotráfico en la región de la Triple Frontera entre Brasil, Argentina y Paraguay, así como su postura radical pidiendo la destrucción del Estado de Israel y otorgaron legitimidad a un grupo reconocido como terrorista por innumerables países democráticos”, dice el comunicado.
Franca se disculpó con los funcionarios judíos el día lunes en una reunión donde estuvo presente el presidente de la Confederación Israelita Brasileña, la organización judía más importante del país. Durante la reunión organizada por el congresista Floriano Pesaro, que es judío, el gobernador declaró que no estaba familiarizado con los nombres en la delegación libanesa.
Los funcionarios judíos invitaron a Franca a asistir a la próxima ceremonia en memoria de las víctimas del atentado de la AMIA de 1994 en Buenos Aires, que fue atribuido a Hezbolá e Irán y causó la muerte de 85 personas.
“El jeque es el hombre principal del grupo terrorista Hezbolá en América del Sur. Brasileño de origen libanés y naturalizado, Wehbe asumió este cargo después de que Mohsen Rabbani se viera obligado a huir de Argentina acusado de haber sido el arquitecto del ataque de la AMIA”, informó la revista “Veja”.
La Federación Judía criticó el hecho de que “la máxima autoridad del estado” diera la bienvenida al jeque.
“Como judíos brasileños, estamos obligados a alertar, exigir y apoyar siempre a las autoridades legalmente constituidas en el territorio nacional, para que permanezcan verdaderamente alerta en tales situaciones y no den refugio a quienes consideran que el terror es una forma única de expresión”, declara la Federación.
San Pablo es el estado más rico y poblado de Brasil, incluyendo unos 60.000 judíos.