El dirigente de Hamás, Khalil al-Hayya, sostiene que el arsenal del movimiento es “un derecho garantizado por el derecho internacional”. También rechaza que una Fuerza Internacional de Estabilización asegure la Franja para desarmar a los grupos terroristas, como prevé el plan integral de alto el fuego de Donald Trump.
En su alocución por el 38º aniversario de la fundación de Hamás, Hayya añade que las FSI deben ceñirse a “mantener el alto el fuego y separar a las partes a lo largo de la frontera de la Franja de Gaza”. Hamás difundió por escrito sus declaraciones.
Hayya insiste en el carácter legítimo del armamento del grupo. “Afirmamos que la resistencia y sus armas son un derecho legítimo garantizado por el derecho internacional a todas las naciones bajo ocupación”, dice Hayya. A su juicio, esa premisa no admite renuncias y define la postura ante cualquier arreglo.
El dirigente añade: “Estamos abiertos a estudiar cualquier propuesta para preservar este derecho garantizando al mismo tiempo el establecimiento de un Estado palestino independiente y la autodeterminación de nuestra nación palestina”. La fórmula vincula el mantenimiento de las armas con metas estatales en los términos que plantea el plan.
El ISF integra la segunda etapa del proyecto, respaldada por una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU aprobada el mes pasado. El texto plantea una “vía creíble” hacia la autodeterminación y un Estado palestinos, tras la reconstrucción de una Gaza desmilitarizada y la reforma de la Autoridad Palestina.
La Autoridad Palestina, con sede en Judea y Samaria, debe reformarse “fielmente”, según ese esquema, para que se la considere apta para asumir el control de la Franja. La transferencia ocurriría desde las fuerzas internacionales; el plan prevé avances en la reconstrucción y la consolidación de administración palestina en Gaza.
En el mismo discurso, Hayya exhorta a Hamás y a Fatah, que dirigen la AP, a que “alcancen un terreno común y acuerden un programa nacional conjunto”. También propone “revivir la vida política palestina a través de las urnas”. Las elecciones nacionales de 2006 dieron ventaja a Hamás sobre Fatah.
Hayya elogia el ataque liderado por Hamás del 7 de octubre de 2023, origen de la guerra, y agradece la ayuda humanitaria enviada a Gaza por países árabes y musulmanes.
El dirigente saluda a “quienes apoyaron a nuestro pueblo en las plazas, calles y universidades”, en alusión a las protestas antiisraelíes extendidas en países occidentales. El texto vincula muchas de esas movilizaciones con el aumento de la retórica antisemita y ataques contra judíos en distintos puntos del mundo.
