El director general de inteligencia de Egipto, el general Abbas Kamel, dirige la investigación sobre las sospechas de que agentes encubiertos de Hamás participaron en el ataque terrorista del 4 de agosto en una carretera de El Cairo que dejó 20 muertos y 47 heridos. Un vehículo cargado de explosivos se estrelló contra tres automóviles y explotó frente al Instituto Nacional del Cáncer, que, junto con otros edificios, resultó gravemente dañado por la explosión.
El gobierno egipcio declaró el incidente como un ataque terrorista, atribuyéndolo en un principio al grupo clandestino Hasm de los Hermanos Musulmanes. Cuando salió a la luz la horrible magnitud de la explosión, Hamás emitió una declaración apresurada en la que se negaba a asumir la responsabilidad de la planificación o la ejecución del crimen.
Sin embargo, DEBKAfile puede informar exclusivamente de sus fuentes de inteligencia que el miércoles 8 de agosto, la investigación egipcia tomó un nuevo rumbo. Se sospechaba que agentes de inteligencia de Hamás que operaban en El Cairo estaban involucrados en el ataque, o al menos que mantenían estrechos vínculos con los perpetradores. Los oficiales de seguridad comenzaron entonces a acorralar a los agentes de Hamás, incluido el alto mando Sami Saleh.
Si se demuestra que la organización terrorista palestina Hamás que gobierna la Franja de Gaza está implicada en el bombardeo de El Cairo, habrá amplias repercusiones. La actitud del régimen de El-Sisi hacia Hamás se verá afectada y puede perder su posición en una de las pocas capitales árabes dispuestas a jugar con los extremistas palestinos. Esto influirá en la relación entre Israel y Hamás, habida cuenta de los esfuerzos proactivos de Egipto como intermediario para lograr una tregua en Gaza.
El momento de la atrocidad en El Cairo puede ser significativo. Ocurrió pocos días después de que una delegación de alto nivel de Hamás, encabezada por su subdirector Saleh Al-Arouri, regresara de Teherán después de haber sido recibida con todos los honores por altos funcionarios del CGRI. Arouri tiene una oficina permanente en Beirut, desde la que mueve los hilos de las operaciones terroristas de la organización en la región, incluido Israel.
El presidente Abdel-Fatteh El-Sisi pronunció un discurso inusual ante la nación el miércoles por la noche en el que subrayó que es deber de todo egipcio apoyar al gobierno en sus esfuerzos por derrotar a los terroristas.