Moussa Abu Marzuk, alto líder de Hamás, declaró ante un tribunal británico y exigió que se elimine la clasificación de su grupo como organización terrorista.
Durante la audiencia, el grupo palestino se definió como un “movimiento de liberación y resistencia islámica palestino” con el objetivo de liberar Palestina y oponerse al proyecto sionista, según reportó Drop Site News.
El propósito de Hamás, declarado públicamente, es destruir a Israel. Con frecuencia intenta asesinar civiles israelíes al azar. El 7 de octubre de 2023, dirigió a miles de terroristas que mataron y secuestraron sistemáticamente a personas de todas las edades, incluso dentro de sus casas y durante un festival de música. También asesinó ciudadanos británicos.
Marzuk declaró que el ataque tuvo como blanco exclusivo objetivos militares. Negó los asesinatos de civiles y aseguró falsamente que fueron hechos aislados o ejecutados por personas ajenas a Hamás.
La acusación contra Reino Unido incluye una denuncia de complicidad en un supuesto “genocidio” israelí por suministrar armas a Israel. Marzuk también sostuvo que su organización no representa amenaza alguna para el Reino Unido.
El equipo legal que representa a Hamás sin recibir remuneración —por la ilegalidad de aceptar fondos del grupo— argumentó que las acciones de Hamás se ajustan a la definición legal de “terrorismo” en Reino Unido, pero afirmó que lo mismo ocurre con el ejército israelí, el ucraniano y el británico.
The Guardian informó que la secretaria de Relaciones Exteriores en la sombra, Priti Patel, rechazó tajantemente esa postura. Señaló que Hamás es una organización terrorista respaldada por Irán, responsable de secuestros, torturas y asesinatos, incluidos ciudadanos británicos. Añadió que representa una amenaza constante para la seguridad del Reino Unido, la paz en Oriente Medio y los derechos humanos en Gaza.