El martes, un dron proveniente del Líbano explotó cerca de un jardín de infantes en la ciudad de Nesher, al norte de Israel. El impacto causó daños en las ventanas y dispersó escombros en el área de juegos al aire libre. Aunque no se activaron sirenas de advertencia en este suburbio cercano a Haifa, el personal del jardín de infantes, al estar al tanto de las alertas en áreas cercanas, trasladó a los niños al refugio antiaéreo de manera preventiva.
Afortunadamente, no se registraron heridos entre los niños ni el personal. El dron, que colisionó con un árbol junto a la instalación, provocó daños leves al edificio y a una valla del centro educativo. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) anunciaron que están investigando la razón por la que las sirenas no sonaron en Nesher, a pesar de que en otras áreas del norte sí se activaron mientras los militares trataban de interceptar el dron.
Durante el incidente, las sirenas fueron activadas en la región de Galilea Occidental y en zonas cercanas a Haifa. Los helicópteros de la Fuerza Aérea israelí intentaron interceptar el dron, pero no tuvieron éxito. El alcalde de Nesher, Roi Levi, afirmó que, tras el ataque, los niños fueron trasladados a otro jardín de infantes como medida de seguridad.
En redes sociales circularon imágenes del dron de Hezbolá volando sobre la zona de Haifa antes de impactar finalmente en Nesher. Este ataque aéreo ocurrió en un contexto de intensificación de las hostilidades entre las FDI y el grupo terrorista Hezbolá, que opera desde el Líbano. Las FDI continúan su ofensiva contra Hezbolá con el objetivo de garantizar el retorno seguro de los residentes del norte de Israel, quienes fueron desplazados por los ataques casi diarios de la organización respaldada por Irán.
Israel intensifica operaciones militares tras ataques de Hezbolá
Las Fuerzas de Defensa de Israel emitieron órdenes de evacuación para 11 edificios en el suburbio Dahiyeh, al sur de Beirut, después de que se produjeran ataques aéreos israelíes en la zona. Los medios libaneses informaron que los objetivos de los ataques eran activos de Hezbolá. El coronel Avichay Adraee, portavoz en árabe de las FDI, publicó mapas detallados instando a los civiles a mantenerse a una distancia de al menos 500 metros de los puntos atacados en Dahiyeh.
Imágenes capturadas por AFPTV mostraron columnas de humo elevándose desde la zona afectada. Testigos indicaron que se escucharon disparos de advertencia de los residentes antes de los ataques, como señal para que la población evacuara rápidamente tras la llamada de evacuación. Este episodio se enmarca en un contexto de enfrentamientos cada vez más intensos en la frontera norte de Israel, donde las FDI han intensificado su campaña contra Hezbolá.
En una declaración hecha el martes, el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, afirmó que no habrá alto el fuego ni pausa en las operaciones en el Líbano hasta que se logren los objetivos establecidos en la guerra. Katz destacó que las acciones de las FDI seguirán debilitando las capacidades de Hezbolá y que el objetivo final es garantizar la seguridad de los residentes del norte de Israel y desmantelar a Hezbolá de manera definitiva.
El ministro dejó claro que Israel continuará atacando a Hezbolá con toda su fuerza hasta cumplir con los objetivos militares. Katz también subrayó que Israel no aceptará ningún acuerdo que no garantice el derecho del país a prevenir el terrorismo y a hacer cumplir la ley de manera independiente, especialmente en relación con el desarme de Hezbolá y su expulsión más allá del río Litani.
Hezbolá lanza ataques contra el norte de Israel
El lunes, Hezbolá disparó alrededor de 190 cohetes y drones hacia el norte de Israel, y provocó siete personas heridas y causando daños a edificios y vehículos. A pesar de esto, las FDI informaron que la mayoría de los cohetes fueron interceptados por las defensas aéreas israelíes o cayeron en áreas abiertas, minimizando los daños. Los enfrentamientos en la frontera norte se han intensificado notablemente desde septiembre, cuando Israel lanzó una serie de fuertes ataques aéreos en respuesta al fuego transfronterizo de Hezbolá.
En ese mes, las FDI realizaron una incursión terrestre en el sur del Líbano con el objetivo de alejar a las fuerzas de Hezbolá de la frontera israelí. Los ataques aéreos israelíes mataron a importantes líderes de Hezbolá, incluido su comandante Hassan Nasrallah. Desde octubre de 2023, los ataques de Hezbolá han cobrado la vida de 41 civiles israelíes, además de 62 soldados y reservistas de las FDI, que han muerto en enfrentamientos transfronterizos y en las operaciones terrestres del sur del Líbano.
En paralelo, dos soldados israelíes murieron en un ataque con drones proveniente de Irak, y también se han registrado ataques desde Siria, aunque sin víctimas mortales. Según las estimaciones de las FDI, alrededor de 3.000 combatientes de Hezbolá han muerto durante la guerra. Además, se ha reportado la muerte de unos 100 miembros de otros grupos terroristas en el Líbano, así como de cientos de civiles.
Hezbolá ha dado a conocer el nombre de 516 miembros de la organización que han muerto a manos de Israel durante los combates, la mayoría en el Líbano, aunque también hay algunos en Siria. Estas cifras no han sido actualizadas de manera sistemática desde que Israel intensificó su ofensiva contra Hezbolá en septiembre.