Un informe confidencial de observadores de sanciones de la ONU señala que los islamistas hutíes de Yemen han evolucionado de un grupo armado localizado y con capacidades limitadas a una organización militar poderosa, con el apoyo del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria de Irán (CGRI), Hezbolá y especialistas iraquíes.
El informe anual, elaborado por un panel independiente de expertos para el Consejo de Seguridad de la ONU, detalla que los hutíes han recibido entrenamiento táctico y técnico fuera de Yemen. Para esto, sus combatientes han viajado con pasaportes falsos a Irán, Líbano e Irak.
En el último año, los hutíes han lanzado una serie de ataques con drones y misiles contra barcos en los importantes canales de navegación del mar Rojo. Estos ataques, realizados en apoyo a los palestinos en la guerra de Gaza con Israel, han afectado el comercio marítimo global, obligando a desviar rutas comerciales.
El informe de la ONU, visto por Reuters, destaca que “los múltiples testimonios recogidos por el panel, de expertos militares, funcionarios yemeníes e incluso individuos cercanos a los hutíes, indican que no tienen la capacidad de desarrollar y producir, sin apoyo extranjero, sistemas de armas complejos”. El documento señala que la escala y alcance del apoyo externo —incluyendo suministros de materiales militares, tecnología, financiamiento y entrenamiento— son “sin precedentes”.
Los sistemas de armas empleados por los hutíes guardan similitudes con los desarrollados y utilizados por Irán y otros grupos del “Eje de la Resistencia”, una coalición de grupos respaldados por Teherán que se oponen a Israel y a la influencia de Estados Unidos en el Medio Oriente. El informe atribuye la transformación militar de los hutíes a la asistencia material, técnica y de entrenamiento proporcionada por la Fuerza de Cuartel general de la Guardia Revolucionaria (CGRI), Hezbolá y especialistas iraquíes. En particular, la Fuerza Quds (CGRI-QF), la rama del CGRI para operaciones en el extranjero, ha jugado un papel clave.
El “Eje de la Resistencia” ha sido desarrollado a lo largo de los años mediante el apoyo de Irán, y agrupa a los hutíes, al grupo terrorista palestino Hamás, a Hezbolá en el Líbano y a diversas milicias armadas en Irak y Siria. Por el momento, los hutíes respaldados por Irán no han emitido una respuesta oficial al informe de la ONU.