En lo que la policía describió como un asalto terrorista en el Este de Jerusalén el sábado por la tarde, un joven israelí fue apuñalado y gravemente herido. Tras una breve persecución, un agente disparó al presunto atacante.
El varón judío haredí de 20 años fue encontrado gravemente herido y con un cuchillo en la espalda en un parque de la calle Sheshet HaYamim, en el distrito de Givat HaMivtar, cerca de Shuafat, entre French Hill y Ramat Eshkol.
El personal médico del MDA lo trasladó al Centro Médico Shaare Zedek de la ciudad.
Al parecer, el presunto autor del apuñalamiento huyó del lugar a pie y, según la policía, se enviaron numerosos agentes a controlar la zona.
Poco después, cuando decenas de niños pequeños estaban jugando y practicando fútbol, un agente localizó al sospechoso en un campo de fútbol del barrio de Sheikh Jarrah, no muy lejos de la comisaría.
Tras divisar al sospechoso agitando lo que resultó ser la funda del cuchillo del incidente, que tuvo lugar a unos 800 metros de distancia, el agente comenzó a perseguirlo, según la policía.
Al parecer, el sospechoso se dio la vuelta y se acercó al agente. La policía publicó una foto del objeto y declaró: “El policía, que creía que su vida corría peligro, disparó y lo neutralizó”.
Según informan los medios de comunicación en lengua hebrea, el presunto atacante, un adolescente de el Este de Jerusalén, fue trasladado al hospital Hadassah Mount Scopus en mal estado.
Un puesto de guardia en un cruce en el norte de Judea y Samaria fue golpeado por un automovilista palestino a primera hora del sábado en lo que las autoridades israelíes describieron como un posible intento de embestida.
El personal militar israelí resultó ileso en el incidente.
Los incidentes se produjeron cuando las tensiones en Judea y Samaria son máximas, ya que las tropas israelíes siguen llevando a cabo una campaña antiterrorista que se inició a principios de este año tras una sucesión de atentados que dejaron 19 muertos. Los ataques y las operaciones de detención en Judea y Samaria se han cobrado la vida de cuatro soldados.
Además, más de 120 islamistas palestinos han perecido, muchos de ellos llevaban a cabo ataques terroristas o participaban en combates con el personal de seguridad.