Los hutíes de Yemen, respaldados por Irán, afirmaron haber lanzado dos misiles contra Israel, poco después de que el ejército israelí anunciara la interceptación de un proyectil procedente de ese país.
Según un comunicado militar hutí, “el primer ataque tuvo como objetivo el Aeropuerto Ben Gurion” en Tel Aviv, mientras que el segundo misil fue dirigido a una planta de energía al sur de Jerusalén.
Los hutíes también declararon haber atacado el portaaviones estadounidense USS Harry S. Truman, aunque no hubo reacción inmediata por parte de las fuerzas armadas de Estados Unidos. Durante la noche, el ejército israelí informó que había derribado un misil lanzado desde Yemen antes de que ingresara en su territorio, sin reportarse heridos.