La Unión Europea condenó el lunes los planes de Israel de construir más de 2.000 nuevas viviendas en Judea y Samaria, instando al Estado judío a poner fin de inmediato a toda “actividad de asentamiento”.
El mes pasado, el comité de planificación de construcción de Israel dio luz verde a más de 2.000 nuevas unidades de vivienda destinadas a las ciudades judías de Judea y Samaria.
El lunes, la UE denunció los planes para los nuevos proyectos de vivienda, calificándolos de ilegales en virtud del derecho internacional.
“En octubre de 2019, las autoridades israelíes aprobaron el avance de más de 2.000 viviendas en asentamientos ilegales en la Cisjordania ocupada”, dijo la UE en un comunicado el lunes por la tarde.
“La posición de la Unión Europea sobre la política israelí de asentamientos en el territorio palestino ocupado es clara y no ha cambiado: toda actividad de asentamiento es ilegal según el Derecho internacional y erosiona la viabilidad de la solución de dos Estados y las perspectivas de una paz duradera, tal como se reafirma en la Resolución 2334 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas”.
La declaración de la UE también condenó a Israel por sus planes de construir una carretera de circunvalación, incluyendo un nuevo túnel, para permitir a los conductores israelíes que viajan por la Ruta 60, la principal arteria de tráfico norte-sur en Judea y Samaria, evitar el pueblo controlado por la Autoridad Palestina de Al Aroub en la región de Gush Etzion al sur de Jerusalén.
“Las autoridades israelíes también aprobaron un permiso de construcción para la edificación de una nueva carretera de túnel, que atraviesa Belén hacia el oeste. La construcción progresiva de una red de carreteras separada, que conecte los asentamientos y puestos avanzados entre sí y con la red de carreteras de Israel, evitando al mismo tiempo las ciudades y comunidades palestinas, está afianzando la fragmentación de Judea y Samaria. La UE hace un llamado a Israel para que ponga fin a todas las actividades de asentamiento, de conformidad con sus obligaciones como potencia ocupante”.
“La UE seguirá apoyando la reanudación de un proceso significativo hacia una solución negociada de dos Estados, la única forma realista y viable de satisfacer las legítimas aspiraciones de ambas partes”.