El CEO de OpenAI, Sam Altman, empresario tecnológico de origen judío, admitió haber subestimado la gravedad del antisemitismo en Estados Unidos, particularmente en el espectro político de izquierda.
En una reciente publicación, Altman expresó su cambio de perspectiva: “Durante mucho tiempo dije que el antisemitismo, sobre todo en la izquierda estadounidense, no era tan grave como la gente decía. Me gustaría decir que estaba totalmente equivocado”.
Esta declaración surge en un contexto de creciente preocupación por la retórica antijudía observada en universidades y protestas contra las acciones militares de Israel en Gaza.
Altman, recientemente nombrado CEO del año por la revista TIME, no detalló los motivos específicos de su cambio de actitud, pero destacó su inquietud y falta de comprensión sobre cómo abordar el problema, concluyendo que la situación es profundamente preocupante.