El Departamento de Estado de Estados Unidos ha emitido una enérgica condena contra Roger Waters, ex líder de Pink Floyd, por su reciente concierto en Berlín, calificándolo de «antisemita» y señalando imágenes ofensivas y minimización del Holocausto.
Departamento de Estado de EE.UU. condena el concierto de Roger Waters
El Departamento de Estado de Estados Unidos ha condenado enérgicamente el concierto de Roger Waters en Berlín, calificándolo de «antisemita» y afirmando que contenía imágenes profundamente ofensivas para el pueblo judío y minimizaba el Holocausto. Esta condena surge como respuesta a los comentarios críticos de Deborah Lipstadt, enviada del departamento para combatir el antisemitismo, quien había expresado su desaprobación hacia las actuaciones de Waters.
El Departamento de Estado resalta el largo historial de Waters utilizando tropos antisemitas para denigrar al pueblo judío. Como líder del movimiento Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS), ha promovido el boicot cultural a Israel. Líderes judíos de todo el mundo han advertido durante mucho tiempo que las fuertes críticas de Waters hacia el trato de Israel hacia los palestinos cruzan la línea del antisemitismo.
Reacciones y controversia en torno a las actuaciones de Waters
Las críticas hacia Roger Waters no se han limitado al Departamento de Estado. Los ayuntamientos de Fráncfort y Múnich intentaron cancelar los conciertos en sus ciudades, aunque sin éxito. Grupos de manifestantes, incluyendo líderes judíos y políticos locales, se han presentado en las salas de conciertos en protesta. Incluso hubo un manifestante que subió al escenario en Fráncfort con una bandera israelí.
Además, la policía alemana está investigando si el disfraz utilizado por Waters, similar al uniforme de un oficial nazi, constituye una apología del nazismo, lo cual está prohibido en Alemania.
Opiniones de expertos y autoridades
Katharina von Schnurbein, enviada antisemita de la Unión Europea y alemana, expresó su repulsión hacia la obsesión de Waters por menospreciar y trivializar el Holocausto. Cabe destacar que Waters ha comparado anteriormente a Israel con la Alemania nazi. Deborah Lipstadt, enviada del Departamento de Estado, respaldó estas críticas y manifestó su total acuerdo con la opinión de von Schnurbein.
Ante las acusaciones sobre su disfraz, Waters argumentó en las redes sociales que los elementos cuestionados en su actuación son una clara declaración en contra del fascismo, la injusticia y la intolerancia en todas sus formas.
Investigación en curso
La policía alemana continúa con la investigación sobre las actuaciones de Roger Waters y su posible violación de las le yes que prohíben la apología del nazismo. No se han anunciado medidas legales definitivas hasta el momento.
El concierto de Roger Waters en Berlín ha generado una fuerte polémica y diversas reacciones. Las acusaciones de antisemitismo y la controversia en torno a su actitud y sus representaciones han llevado al Departamento de Estado de Estados Unidos a emitir una condena enérgica. La investigación sobre posibles violaciones legales continúa, mientras que Waters defiende su actuación como una protesta contra el fascismo y la intolerancia.