Un individuo de Anchorage, Alaska, identificado como Luke Foster, ha sido sentenciado a 18 meses de cárcel por vandalizar un museo judío y otros lugares con simbología nazi, además de tráfico de drogas.
Delitos y castigo: Vandalismo y tráfico de drogas en Anchorage
Foster realizó actos de vandalismo en el año 2021 en Anchorage, el Museo Judío de Alaska fue uno de los principales objetivos. Marcó el lugar con pegatinas que mostraban la esvástica y la frase “WE ARE EVERYWHERE”, además de otros siete lugares de la ciudad.
El acusado también fue encontrado culpable de traficar setas alucinógenas a través de Internet. Ambos delitos llevaron a su condena de 18 meses de prisión.
Las pruebas de los actos de vandalismo y el material neonazi se encontraron en su casa a finales del 2021 durante una redada policial, según reportes de Alaska Public Media.
Reacciones de la comunidad judía de Alaska
El acto de vandalismo ha tenido un impacto significativo en la comunidad judía de Anchorage. El rabino Yosef Greenberg, presidente del consejo del museo, se ha manifestado sobre el incidente, haciendo un llamado a la conciencia y tolerancia.
Greenberg, sin embargo, mostró optimismo ante las disculpas presentadas por Foster durante el juicio.
El Museo Judío de Alaska, que abrió sus puertas en 2013, es un importante centro de cultura y educación para la comunidad judía de Alaska, a menudo denominada los “Elegidos Congelados”.
Los judíos en la política de Alaska y la percepción del público
Varios políticos judíos destacados de Alaska, incluyendo varios alcaldes de Anchorage y el candidato al Senado y a la Cámara de Representantes de la UA, Al Gross, expresaron su preocupación y solidaridad ante los hechos.
La comunidad judía en Anchorage ha enfrentado desafíos anteriormente, incluso en protestas relacionadas con la pandemia de COVID-19, en las que se utilizaron imágenes del Holocausto de manera ofensiva.
La condena a Luke Foster resalta la firmeza del sistema de justicia de Alaska contra actos de odio y crimen organizado.