El miércoles, dos estudiantes que participaban en una manifestación de apoyo a Israel en la Universidad DePaul de Chicago fueron atacados por hombres enmascarados, lo que dejó a las víctimas con heridas leves. El incidente ha generado preocupación sobre la posibilidad de antisemitismo en el campus, una universidad de tradición católica.
Las autoridades de la universidad han informado que están colaborando con la policía de Chicago para investigar si el ataque podría considerarse un crimen de odio.
En los últimos 13 meses, la violencia contra judíos estadounidenses ha alcanzado niveles sin precedentes tras el inicio de la guerra entre Israel y el grupo terrorista Hamás en Gaza. Sin embargo, también se han registrado ataques contra palestinos estadounidenses en diversas partes del país.
Uno de los estudiantes agredidos es un exsoldado de las Fuerzas de Defensa de Israel, quien sostenía un cartel identificándose como tal e invitando al diálogo, según explicó Josh Weiner, cofundador de la Alianza Judía de Chicago. Weiner afirmó conocer personalmente a ambas víctimas y haber conversado con ellas tras el incidente.
El presidente de la universidad, Robert Manuel, señaló que los estudiantes solo sufrieron heridas menores y que ambos decidieron no recibir tratamiento médico. “Estamos profundamente indignados por lo ocurrido en nuestro campus”, expresó Manuel.
Manuel también destacó: “Entendemos que para una parte significativa de nuestra comunidad judía, Israel es un elemento esencial de su identidad. Todos los estudiantes deben sentirse seguros en nuestras instalaciones”, afirmó en una carta dirigida al personal y al alumnado.
La policía de Chicago identificó a los estudiantes como dos hombres, de 21 y 27 años. Indicaron que los agresores golpearon al mayor en la cara y el cuerpo, mientras que al más joven lo empujaron al suelo antes de huir del lugar. Weiner añadió que los estudiantes se encontraban cerca del centro de estudiantes, justo en los límites de la propiedad universitaria.
Aunque los detectives continúan investigando el incidente, en el comunicado de prensa emitido por la policía no se mencionó la posibilidad de un crimen de odio.
La Comisión de Relaciones Humanas de Chicago reveló que, en la primera mitad de 2024, se registraron 50 crímenes de odio contra judíos en la ciudad, igualando la cifra total de 2023. Sin embargo, los ataques contra musulmanes y árabes han mostrado una tendencia a la baja.
El pasado 26 de octubre, un ataque conmocionó a la ciudad cuando un hombre judío de 39 años fue tiroteado mientras se dirigía a una sinagoga, usando un solideo. La policía ha detenido a un sospechoso de 22 años, quien ha sido acusado de terrorismo, crimen de odio e intento de asesinato en un ataque que calificaron como no provocado.