El Ayuntamiento de El Paso, Texas, adoptó el pasado martes la definición de antisemitismo de la Alianza Internacional para la Memoria del Holocausto (IHRA) con el fin de “proteger la seguridad de su comunidad judía y de todas las comunidades” debido al creciente número de delitos de odio en Estados Unidos, según la oficina del concejal y alcalde pro tempore, el diputado Peter Svarzbein.
La definición de trabajo no vinculante de la IHRA sobre el antisemitismo incluye: “Acusar a los judíos como pueblo, o a Israel como Estado, de inventar o exagerar el Holocausto. Acusar a los ciudadanos judíos de ser más leales a Israel, o a las supuestas prioridades de los judíos en todo el mundo, que a los intereses de sus propias naciones. Negar al pueblo judío su derecho a la autodeterminación, por ejemplo, afirmando que la existencia de un Estado de Israel es un empeño racista”.
Otras acciones que la IHRA define como problemáticas son “Aplicar un doble rasero al exigirle un comportamiento que no se espera ni se exige a ninguna otra nación democrática. Utilizar los símbolos e imágenes asociados al antisemitismo clásico (por ejemplo, las afirmaciones de que los judíos mataron a Jesús o el libelo de sangre) para caracterizar a Israel o a los israelíes. Establecer comparaciones de la política israelí contemporánea con la de los nazis”, y también “Responsabilizar colectivamente a los judíos de las acciones del Estado de Israel”.
Antisemitismo en Estados Unidos
En 2021, se denunciaron 2.717 incidentes antisemitas en los Estados Unidos, un aumento del 34% en comparación con los 2.026 incidentes del año anterior, según la Liga Antidifamación. En Texas, se reportaron 112 incidentes antisemitas en 2021 en comparación con 42 incidentes en 2020, un aumento del 167%, lo que convierte a Texas en uno de los cinco estados con las tasas más altas de incidentes antisemitas.
Svarzbein condenó el tiroteo masivo de 2019 en El Paso en el que 23 personas fueron asesinadas y 23 resultaron heridas por un nacionalista blanco, diciendo: “Vemos con demasiada frecuencia en estos días la necesidad de permanecer unidos por todas nuestras comunidades en El Paso y más allá”.
“Me gustaría dar las gracias al Ayuntamiento de El Paso por adoptar la definición de antisemitismo de la IHRA, que no es jurídicamente vinculante, y que establece que ‘el antisemitismo es una determinada percepción de los judíos, que puede expresarse como odio hacia ellos’. Las manifestaciones retóricas y físicas del antisemitismo se dirigen hacia personas judías o no judías y/o sus bienes, hacia instituciones comunitarias judías e instalaciones religiosas”, añadió.
“Somos una comunidad que respeta la primera enmienda, la libertad de religión y de expresión, y que celebra nuestra diversidad y la multitud de comunidades y culturas que hacen de El Paso su hogar”.