El tenista alemán Alexander Zverev se quejó al árbitro durante un partido de que uno de los aficionados sentados en la grada “empezó a utilizar la expresión nazi más famosa del mundo”.
El enfurecido Zverev dijo al juez que “acaba de decir la frase de Hitler más famosa de este mundo. Es inaceptable. Es increíble”.
El árbitro del partido se volvió hacia el público y pidió al aficionado que se identificara, cosa que no hizo. Al cabo de unos minutos, el personal de seguridad empezó a llegar a la tribuna donde estaba sentado el aficionado y pudo identificarlo con la ayuda de otros aficionados que estaban sentados cerca de él. Lo sacaron por la fuerza del estadio y lo dejaron fuera.
La CNN informa de que, tras el partido, Zverev dijo que “en el pasado ya me han dicho los aficionados palabras insultantes hacia mí, pero no para involucrar a Hitler y expresiones nazis. El aficionado empezó a cantar el himno nazi ‘Deutschland Uber alles’ y fue un poco demasiado. Me encanta cuando los aficionados hacen ruido, me encanta cuando los aficionados se emocionan, pero creo que siendo yo alemán y no estando realmente orgulloso de esa historia, no es realmente algo bueno que hacer. Y él, sentado en una de las primeras filas, lo oyó mucha gente. Si no reacciono, creo que es malo por mi parte”.
Un portavoz de la Asociación Americana de Tenis comentó: “Se dirigió un comentario despectivo hacia Zverev. El aficionado fue identificado y escoltado fuera del estadio”.