La comunidad judía en Irlanda ha expresado su rechazo a la presencia del presidente Michael D. Higgins en la próxima ceremonia por el Día del Recuerdo del Holocausto, que se realizará a finales de enero. La noticia ha generado controversia debido a las críticas previas de Higgins hacia Israel y su supuesta falta de acción frente al antisemitismo.
Durante los últimos meses, Higgins ha sido acusado de minimizar el antisemitismo y de deslegitimar las preocupaciones de los judíos irlandeses. En diciembre, Gideon Sa’ar, ministro de Asuntos Exteriores de Israel, calificó al presidente irlandés como “mentiroso antisemita” y anunció el cierre de la embajada israelí en Dublín.
El próximo 26 de enero, Higgins dará un discurso en la conmemoración anual que se celebra en Dublín, siendo esta su sexta intervención en un evento de este tipo. El Jewish Chronicle informó sobre su participación, lo que avivó las críticas dentro de la comunidad judía local.
Yoni Wieder, rabino jefe de Irlanda, afirmó que Higgins desestimó en mayo las preocupaciones israelíes sobre el aumento del antisemitismo en el país, calificándolas como “un ejercicio de relaciones públicas”. Esta actitud ha generado descontento y desconfianza entre los judíos irlandeses.
“El presidente no ha reconocido el problema del antisemitismo contemporáneo en Irlanda ni ha tomado medidas para enfrentarlo”, declaró Wieder en un comunicado difundido por medios británicos. “Con esa postura, su discurso en el acto del Holocausto sonará vacío para muchos judíos”.
Wieder también advirtió que la presencia de Higgins podría ofender a los asistentes, tanto judíos como no judíos, que esperan un acto solemne y unificador en un día tan significativo. Según el Jewish Chronicle, esta preocupación fue respaldada por otros líderes de la comunidad judía.
Oliver Sears, director de Holocaust Awareness Ireland, expresó al Jewish News del Reino Unido su inquietud por los comentarios de Higgins hacia los judíos irlandeses. “Estamos preocupados por la posibilidad de que, una vez más, cause un insulto grave debido a su insensibilidad”, aseguró Sears.
Las tensiones aumentaron en diciembre, cuando Sa’ar criticó duramente a Higgins en la red social X, después de que el presidente irlandés acusara a Israel de colonizar Egipto mientras recibía al embajador palestino Jilan Abdaljamid. “Una vez mentiroso antisemita, siempre mentiroso antisemita”, escribió Sa’ar, recordando que días antes había anunciado el cierre de la embajada israelí en Irlanda.
En un comunicado, Sa’ar denunció que Irlanda ha adoptado una política “extremadamente antiisraelí” y señaló que Dublín ha cruzado “todas las líneas rojas” en su relación con Israel. Según el ministro, los comentarios y acciones del gobierno irlandés fomentan la deslegitimación y demonización del Estado judío.
Higgins ha rechazado estas acusaciones y ha insistido en que sus críticas van dirigidas al gobierno de Benjamin Netanyahu, no al pueblo judío. En mayo, dijo al Irish Examiner que los irlandeses “no son antisemitas” y recordó que Douglas Hyde, primer presidente de Irlanda, hablaba hebreo entre otros cinco idiomas.
Algunos políticos, incluido el primer ministro Simon Harris y el ministro de Asuntos Exteriores Micheál Martin, han sido acusados de alimentar el antisemitismo con sus duras críticas hacia Israel por la guerra en Gaza. Estos señalamientos se intensificaron ante su aparente falta de interés en abordar el antisemitismo local.
Oliver Sears aseguró al Irish Examiner que en los últimos meses ha percibido un nivel de hostilidad sin precedentes hacia los judíos en Irlanda. “Nunca había visto algo similar”, señaló, refiriéndose a los comentarios de funcionarios electos y al “silencio ensordecedor” de otros líderes políticos.
En una entrevista con The Times of Israel, Wieder alertó sobre el aumento de la “retórica incendiaria” que permite que el antisemitismo prospere en Irlanda. Sin embargo, también advirtió contra exagerar la magnitud del problema, llamando a un enfoque equilibrado.
El gobierno irlandés no ha emitido comentarios sobre la participación de Higgins en el evento conmemorativo. Por su parte, un portavoz del presidente destacó que este será el sexto discurso de Higgins en un acto de esta naturaleza y recordó que visitó Auschwitz en 2020 para conmemorar el 75º aniversario de su liberación.
La ceremonia de Dublín, organizada por Holocaust Remembrance Ireland, se celebrará junto al Ayuntamiento de la ciudad y el Departamento de Infancia, Igualdad, Discapacidad, Integración y Juventud de Irlanda. El evento será parte de una serie de conmemoraciones globales en Polonia, la ONU, Israel y otros lugares por los 80 años de la liberación del campo de Auschwitz-Birkenau.
Durante el acto de 2024, Higgins aprovechó su intervención para referirse a la situación en Gaza y condenar los actos de Hamás ocurridos el 7 de octubre de 2023, calificándolos como “horribles y moralmente reprobables”.
Según el mandatario, su administración promueve un “recuerdo ético”, basado en dar voz a víctimas marginadas y fomentar una conmemoración inclusiva. Al concluir su discurso, Higgins hizo un llamado a reconocer el sufrimiento humano sin distinciones y a abordar las causas de los conflictos que afectan a comunidades vulnerables.
El presidente concluyó afirmando que se deben evitar los discursos que deshumanizan a las personas. “Si creemos que cada vida importa, debemos aceptar que las pérdidas humanas son inaceptables, especialmente cuando afectan a mujeres y niños”, declaró.