El presidente francés Emmanuel Macron se solidariza con la familia de un judío asesinado en febrero, pero no respalda las afirmaciones de que la muerte fue motivada por el antisemitismo.
Jeremy Cohen fue atropellado por un tranvía tras huir de unos atacantes.
“Todos hemos quedado devastados por las escenas que se han hecho públicas y quiero expresar mi solidaridad y mi apoyo a la familia de Jeremy Cohen”, dice Macron a los periodistas en una visita preelectoral a Bretaña.
Pide “total claridad” sobre lo sucedido, al tiempo que insta a que la muerte de Cohen no se convierta en objeto de “manipulaciones políticas”.
La muerte de Cohen se ha filtrado esta semana en las elecciones presidenciales de Francia después de que el candidato judío Eric Zemmour tuiteara sobre ella.
Un miembro de la oficina de Macron también ha hablado con el padre de la víctima, Gerald Cohen, quien ha alegado que los fiscales tardaron en ocuparse del caso e investigar adecuadamente la muerte.
El padre de Cohen, Gerald, declaró el lunes por la noche en el programa TMPM de Canal+ que sus hijos habían tenido que poner ellos mismos carteles pidiendo testigos.
Han localizado un vídeo en el que se ve a Cohen recibiendo un puñetazo y siendo perseguido por una pandilla de unas diez personas, y que desde entonces se ha hecho viral en las redes sociales.
“No entendíamos lo que estaba pasando porque confiábamos en el sistema judicial”, dijo Gerald Cohen. “No entendíamos por qué teníamos que recoger las pruebas, por qué teníamos que hacer todo esto”.