Las facciones islamistas palestinas divididas se reunieron el jueves en Argelia en medio de los esfuerzos por persuadirlas de que firmen un acuerdo de reconciliación que establezca plazos para celebrar elecciones en el plazo de un año, según informaron funcionarios.
“Los palestinos han estado divididos durante más de 15 años, lo que ha debilitado enormemente nuestra causa”, dijo Azzam al-Ahmed, jefe de la delegación de Fatah en la capital argelina.
Ismael Haniyeh, jefe del grupo terrorista Hamás, dijo que las conversaciones mediadas por Argelia que comenzaron el martes habían sido “positivas y tranquilas”.
El partido Al Fatah, del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, y su principal rival, Hamás, están enfrentados desde las elecciones de 2006, que ganó Hamás pero que nunca fueron reconocidas por la comunidad internacional.
Meses después, Hamás se hizo con el control de la Franja de Gaza en un conflicto mortífero que consolidó años de división, mientras que Fatah administraba zonas de Judea y Samaria gestionadas por la Autoridad Palestina.
Los comicios parlamentarios y presidenciales, los primeros desde la división, debían celebrarse el año pasado, pero fueron cancelados, la última de una serie de votaciones previstas que nunca se materializaron.
Hossam Badran, un alto cargo de Hamás, dijo que las partes habían “acordado celebrar elecciones para el Consejo Legislativo Palestino, la presidencia y el Consejo Nacional Palestino en el plazo de un año”.
Pero Fatah, cuyo jefe Mahmud Abbas se encuentra en reuniones en Kazajstán y no en las conversaciones de Argelia, sembró dudas el miércoles por la noche sobre la firma de un proyecto de acuerdo.
Exigió que los miembros de cualquier gobierno de unidad nacional resultante se atengan al derecho internacional, un punto rechazado por Hamás.
“El documento propuesto por Argelia era general y no entraba en detalles”, dijo el analista palestino Khalil Shaheen.