La Unión Europea anunció un paquete financiero para fortalecer la Autoridad Palestina, condicionado a reformas estructurales y con desembolsos durante tres años.
Un plan trianual refuerza el apoyo institucional de la Unión Europea
La Unión Europea confirmó la entrega de 1.600 millones de euros, equivalentes a unos 1.800 millones de dólares, a la Autoridad Palestina entre 2025 y 2028. Así lo informó Dubravka Suica, comisaria europea para el Mediterráneo, en una entrevista concedida a Reuters el 14 de abril de 2025. El paquete busca respaldar a las instituciones palestinas, afectadas por una prolongada crisis económica y política.
En declaraciones a la prensa, Suica explicó que la ayuda estará condicionada a reformas estructurales dentro de la Autoridad Palestina, cuya gestión enfrenta críticas por corrupción, deficiencias administrativas y políticas que han causado fricciones internacionales, especialmente con Israel.
El paquete financiero se divide en tres partes: 620 millones de euros para apoyo directo y reformas institucionales, 576 millones de euros para proyectos de resiliencia en Judea y Samaria y Gaza, y 400 millones de euros en préstamos supervisados por el Banco Europeo de Inversiones, pendientes de aprobación final.
Este volumen de asistencia supera el promedio anual de 400 millones de euros que la UE ha proporcionado a la Autoridad Palestina en la última década. El anuncio ocurrió antes de un diálogo político de alto nivel en Luxemburgo, que reunió a ministros de Exteriores europeos con el primer ministro palestino Mohammad Mustafa.
El sistema de estipendios y su impacto en la cooperación internacional
Uno de los temas más controvertidos es el sistema de pagos a terroristas palestinos presos condenados por ataques terroristas, así como a las familias de terroristas muertos durante ataques en Israel. Esta política ha sido señalada por Israel y gobiernos occidentales como una forma de incentivo al terrorismo.
Según informes de Palestinian Media Watch, los pagos se ajustan a la duración de las penas o la gravedad de los actos, lo que ha provocado fuertes críticas. En febrero de 2024, Mahmoud Abbas firmó un decreto que desvinculó el monto de los pagos de la duración de las condenas, presentándolo como una reforma.
Israel calificó esta modificación como una medida superficial que no cambia el fondo del sistema. Por otro lado, Estados Unidos reconoció el cambio como un paso adelante, aunque pidió a la Autoridad Palestina aplicar reformas sustantivas.
Este mecanismo, además de tensar relaciones con donantes internacionales, plantea desafíos para justificar la continuidad del apoyo financiero sin mecanismos más estrictos de supervisión y cumplimiento de condiciones.
Datos clave sobre la financiación europea a la Autoridad Palestina
- 1.800 millones de dólares serán desembolsados por la UE en un plazo de tres años.
- 620 millones de euros se destinarán a reformas institucionales.
- 576 millones de euros financiarán proyectos en Gaza y Judea y Samaria.
- 400 millones de euros corresponden a préstamos gestionados por el BEI.
- El paquete supera la media de 400 millones anuales entregados en la última década.
- La financiación depende del cumplimiento de reformas y medidas anticorrupción.
Corrupción y debilidad institucional preocupan a los donantes
Distintos informes han señalado que la Autoridad Palestina enfrenta problemas estructurales de corrupción. Documentos del Banco Mundial y auditorías internas revelaron casos de desvío de fondos, nepotismo y empleos ficticios.
La Coalición para la Responsabilidad y la Integridad (AMAN) estimó en 2022 que las pérdidas por corrupción suman cientos de millones de dólares anuales. Estas prácticas afectan directamente la capacidad de la Autoridad Palestina para proveer servicios públicos esenciales.
Ante estas preocupaciones, la Unión Europea reiteró que los fondos estarán sujetos a estricto control y se desembolsarán únicamente si se cumplen objetivos concretos en materia de transparencia y gobernanza.
A pesar de estos requisitos, el historial de falta de mecanismos de verificación efectivos ha generado escepticismo entre los observadores internacionales sobre la capacidad real de supervisión del uso de los fondos.
El futuro de Gaza influye en las decisiones de financiamiento
Además del respaldo financiero, la Unión Europea busca reforzar a la Autoridad Palestina como un actor clave en la eventual gobernanza de Gaza tras la guerra con Hamás. Sin embargo, Israel rechaza su participación sin reformas estructurales.
Desde que Hamás tomó el control de Gaza en 2007, la Autoridad Palestina perdió toda capacidad administrativa en la Franja. Aunque algunos portavoces de Hamás han sugerido transferir la gestión civil a una entidad palestina, el gobierno de Israel lo considera inviable.
Israel argumenta que la AP no cuenta con legitimidad ni capacidad de garantizar seguridad. Además, critica su sistema educativo, señalando que incita al odio a través de contenidos escolares, según el informe de IMPACT-se.
Un estudio de la UE en 2021 reconoció mejoras parciales, aunque advirtió que persistían elementos problemáticos en los libros de texto palestinos. Estas preocupaciones refuerzan la posición israelí de vetar a la AP como interlocutor viable.
Diversidad de opiniones dentro de la Unión Europea sobre la AP
Los gobiernos de la Unión Europea mantienen posiciones divididas respecto al respaldo a la Autoridad Palestina. Francia e Irlanda promueven un mayor apoyo como contrapeso a Hamás y en favor de una solución de dos Estados.
Por el contrario, países como Hungría y Austria se han mostrado reticentes, priorizando la seguridad de Israel y exigiendo reformas significativas antes de liberar nuevos fondos.
Desde 1980, la UE sostiene su compromiso con la solución de dos Estados, pero la falta de avances en las negociaciones y la creciente polarización en la Autoridad Palestina han obstaculizado su implementación.
Según encuestas del Centro Palestino para la Investigación de Políticas y Encuestas realizadas en 2023, más del 60% de los ciudadanos en Judea y Samaria desaprueba la gestión de Mahmoud Abbas, quien no ha convocado elecciones desde 2006.