EL CAIRO, Egipto – La Liga Árabe prometió el domingo $ 100 millones por mes a la Autoridad Palestina para compensar los fondos retenidos por Israel debido a los pagos hechos a las familias de los terroristas palestinos encarcelados y los terroristas palestinos muertos durante ataques mortales contra israelíes.
El presidente palestino, Mahmoud Abbas, se dirigió a la Liga Árabe en El Cairo el domingo como parte de un esfuerzo diplomático para rechazar el plan de paz de Oriente Medio de la administración Trump, que los funcionarios estadounidenses indican que podría ser publicado este verano.
Abbas dijo: “Los árabes deben comprometerse activamente en este momento crítico”.
Utilizó su discurso para apelar a los Estados árabes para ayudar a los palestinos a superar un gran déficit presupuestario.
“Se debe proporcionar una red de seguridad [financiera]”, dijo Abbas.
Israel anunció en febrero que retendría $ 138 millones en pagos mensuales a la Autoridad Palestina para compensar los pagos de la Autoridad Palestina a los terroristas palestinos encarcelados en Israel por terrorismo y violencia, y a las familias de terroristas muertos durante los ataques mortales contra israelíes.
Los palestinos han protestado por la ley, negándose a recibir cualquiera de los impuestos que Israel cobra por ellos mensualmente, siempre que el Estado judío no les transfiera su monto total.
Los impuestos que Israel recauda y las transferencias a la Autoridad Palestina constituyen cientos de millones de shekels, más de la mitad de su presupuesto mensual.
Francia envió una carta oficial a Israel la semana pasada, instando a Israel a “cambiar su decisión de congelar la transferencia de fondos fiscales a la Autoridad Palestina”, informaron el domingo las noticias del Canal 12 de Israel. Israel rechazó la solicitud por ser inmoral y contra las propias leyes de la Unión Europea.
El Ministro de Finanzas de la Autoridad Palestina, Shukri Bishara, anunció recientemente que Ramallah había emprendido una serie de medidas de austeridad para mitigar el impacto de la falta de fondos en las operaciones del gobierno, incluida la reducción de los salarios de los empleados públicos.
En marzo, muchos empleados de la Autoridad Palestina recibieron solo la mitad de sus salarios.
El Banco Mundial advirtió la semana pasada de una crisis económica, si el problema no se resuelve.