Diez organizaciones pro palestinas han solicitado a un tribunal en los Países Bajos que impida la exportación de armas a Israel y el comercio con asentamientos israelíes, citando las altas bajas civiles durante la guerra en Gaza.
Los demandantes argumentan que, como firmante de la Convención sobre el Genocidio de 1948, el Estado holandés tiene la obligación de tomar medidas para prevenir el genocidio. Wout Albers, abogado de organizaciones como Al Haq, Al Mezan y Een Ander Joods Geluid, declaró que los Países Bajos no han cumplido con este deber al continuar con sus exportaciones de armas y cooperación militar. “Esto tiene que parar inmediatamente”, afirmó.
El caso se basa en una orden de la Corte Internacional de Justicia de enero, que instruye a Israel a prevenir actos de genocidio en Gaza. Los demandantes citan las “enormes víctimas civiles” y la “destrucción sin precedentes” para argumentar que se está cometiendo un genocidio.
Además, mencionan las órdenes de arresto de la Corte Penal Internacional contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y su exministro de Defensa, por presuntos crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
Israel ha rechazado las acusaciones de genocidio, afirmando que su campaña militar está dirigida exclusivamente contra Hamás y otros grupos armados que se esconden entre civiles. También consideró las órdenes de arresto como “vergonzosas y absurdas”.