Israel enviará 5 millones de dólares en trigo a Sudán, dijo el domingo la oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu, pocos días después de que se anunciara que los dos países han acordado normalizar sus relaciones, informa Yedioth Ahronoth.
“Esperamos una paz cálida y estamos enviando inmediatamente 5 millones de dólares en trigo a nuestros nuevos amigos en Sudán”, dijo la oficina de Netanyahu en Twitter.
Sudán se ha embarcado en una transición rocosa bajo una administración conjunta civil-militar desde la destitución en abril de 2019 del autócrata Omar al-Bashir, pero ha tenido que hacer frente a graves problemas económicos, incluyendo una fuerte depreciación de la libra sudanesa y un aumento vertiginoso de los precios al consumidor.
La triplicación del precio del pan a finales de 2018 fue el desencadenante inicial de las protestas callejeras contra Bashir que condujeron a su destitución.
El país de África nororiental consume dos millones de toneladas de trigo al año, según las cifras oficiales, y depende en gran medida de las importaciones.
“Israel trabajará estrechamente con Estados Unidos para ayudar a la transición de Sudán”, añadió Netanyahu.
Los Emiratos Árabes Unidos y Bahrein firmaron un acuerdo en la Casa Blanca el mes pasado para normalizar los lazos con el Estado judío, pero Sudán tiene un simbolismo añadido como nación árabe que ha estado en guerra con Israel.
La noticia de la normalización de Sudán-Israel llegó el viernes, poco después de que el Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, declarara que Washington se estaba moviendo formalmente para eliminar a Sudán de la lista de estados patrocinadores del terrorismo, una designación que estranguló la economía de Jartum durante décadas.
Sudán será el quinto país árabe en forjar relaciones diplomáticas con el Estado judío.
“Pronto una delegación israelí se reunirá en Sudán con un homólogo sudanés para discutir la cooperación en muchos campos, incluyendo la migración, de la que estamos hablando”, dijo Netanyahu, en declaraciones al comienzo de una reunión de gabinete el domingo.
“Estamos ampliando el círculo de la paz. Otros países se unirán solo si nos adherimos constantemente a esta política”.
El movimiento para normalizar los lazos ha dejado al descubierto profundas divisiones sociales en Sudán, algunos lo llaman una traición y otros lo ven como una forma de salvar la economía que se hunde.