El domingo estaba previsto que el gabinete aprobara la creación de un museo en honor del célebre físico judío Albert Einstein.
El gasto estimado para la construcción del museo en Jerusalén es de 64 millones de NIS (18 millones de dólares).
Einstein dejó sus escritos y su archivo a la Universidad Hebrea de Jerusalén tras su muerte. La mayoría de ellos se guardaron en los Archivos Albert Einstein, que se dice que tienen decenas de miles de objetos y se encuentran en el campus de Givat Ram de la universidad.
El primer ministro suplente, Naftali Bennett, describió el sábado a Albert Einstein como un activo y el nombre más reconocido en el mundo por su inteligencia, ciencia y genialidad.
Albert Einstein es considerado un genio en todo el mundo, incluyendo China, India y Estados Unidos.
Expresó su deseo de que “todos los que deseen familiarizarse con Einstein, la inteligencia judía y la inteligencia en general” utilicen el museo como lugar de peregrinación.
Será una inspiración para los adolescentes israelíes, así como para los visitantes y científicos de todo el mundo.
El museo se construirá en el emplazamiento de Givat Ram y mostrará la vida y las contribuciones de Einstein, así como sus conexiones con Israel y el judaísmo. El museo también servirá de centro de enseñanza de la ciencia y la tecnología.
Einstein, nacido en Alemania, está considerado como uno de los físicos más grandes de la historia. Sus teorías sobre la relatividad transformaron su área al ofrecer nuevas perspectivas sobre cómo se mueven las cosas en el espacio y el tiempo.
Einstein, que recibió el Premio Nobel de Física en 1921, también hizo importantes contribuciones a la teoría de la mecánica cuántica. Sus cáusticas ocurrencias, así como su característico pelo y barba indómitos y sus pobladas cejas, le ayudaron a convertirse en una leyenda de la cultura popular.
En 1933, cuando el partido nazi se hizo con el poder, huyó de Alemania y emigró a Estados Unidos.
Einstein fue uno de los fundadores de la Universidad Hebrea y tenía fuertes vínculos con el sionismo y el judaísmo. Israel ofreció a Einstein el cargo tras el fallecimiento de Chaim Weizmann, el primer presidente del país, en 1952.
Einstein declinó la invitación, aunque afirmó estar “muy afectado” por ella, ya que consideraba que carecía “tanto de la aptitud natural como de la experiencia para tratar eficazmente con la gente y ejercer funciones oficiales” y que su especialidad residía en las “preocupaciones objetivas”.
Hasta su fallecimiento en 1955, a la edad de 76 años, Einstein residió en Princeton, Nueva Jersey.
Según el presidente de la universidad, Asher Cohen, “la herencia de la investigación y la brillantez académica de Albert Einstein, uno de los principales defensores de Israel y uno de los fundadores de la universidad, está presente en cada piedra fundacional de la Universidad Hebrea”.
Aplaudió la creación de un museo “que reconocerá y preservará el legado del mayor científico de nuestro tiempo”.
Desde hace más de una década se viene hablando de la apertura de un museo de Einstein en Jerusalén, pero hasta ahora no se ha hecho nada.