KABUL, Afganistán – Un futbolista afgano que jugaba en la selección nacional juvenil cayó tras intentar aferrarse a un avión de Estados Unidos que trasladaba a personas fuera de Kabul, controlada por los talibanes, según informó el jueves una federación deportiva.
La Dirección General de Educación Física y Deportes de Afganistán, una institución gubernamental que trabajaba con grupos deportivos, confirmó la muerte de Zaki Anwari en el caos que estalló en el aeropuerto de la capital esta semana.
“Anwari, como miles de jóvenes afganos, quería abandonar el país pero se cayó de un avión estadounidense y murió”, dijo el grupo en un comunicado publicado en Facebook.
Miles de afganos han acudido al aeropuerto esta semana en un intento de huir del país, tras la ofensiva relámpago de los talibanes que terminó con su asunción del poder cuando el presidente afgano Ashraf Ghani huyó.
En un estremecedor vídeo grabado el lunes en el aeropuerto, se veía a cientos de personas corriendo junto a un avión de las Fuerzas Aéreas estadounidenses mientras éste cogía velocidad en la pista; varios hombres se agarraban desesperadamente al costado.
Otros vídeos difundidos en las redes sociales mostraban a dos personas cayendo al vacío desde un avión C-17 tras su despegue.
Más tarde se encontraron restos humanos en un pozo de la rueda, según confirmó el ejército estadounidense, que añadió que estaba investigando las muertes denunciadas relacionadas con el C-17.
“Antes de que la tripulación pudiera descargar la carga, el avión fue rodeado por cientos de civiles afganos”, dijo la portavoz de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, Ann Stefanek.
“Ante el rápido deterioro de la situación de seguridad en torno a la aeronave, la tripulación del C-17 decidió abandonar el aeródromo lo antes posible”.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se ha visto presionado en su país y en el extranjero para que explique cómo su administración no estaba aparentemente preparada para el rápido asalto de los talibanes, y la forma en que las tropas estadounidenses se están retirando de Afganistán.
Los recuerdos del brutal régimen de los talibanes en la década de 1990 -en el que se prohibía la música y la televisión, se apedreaba a la gente hasta la muerte y se confinaba a las mujeres en sus casas- han provocado el pánico ante lo que se avecina, lo que ha llevado a muchos afganos a intentar huir.