Desde el Hotel Rey David de Jerusalén, el canciller alemán, Olaf Scholz, afirma que ha discutido con el primer ministro israelí, Naftali Bennett, los actuales acontecimientos en Ucrania durante su visita relámpago a Israel.
“Estamos muy preocupados por el curso ulterior del conflicto. Quiero repetir mi llamamiento para que se detengan inmediatamente todas las acciones militares. Deben cesar los ataques contra la población civil y las infraestructuras civiles. Y, por supuesto, ahora se trata de volver a dar una gran oportunidad a la diplomacia”, afirma Scholz.
Scholz dice que decidió hacer el viaje a pesar de la crisis mundial “y era justo hacerlo”.
“Alemania siempre estará al lado de Israel”, dice Scholz, y subraya la “responsabilidad” del país con el Estado judío.