Matthew Miller, portavoz del Departamento de Estado de EE. UU., ha exhortado a Israel a no avanzar con la aprobación de una ley que afectaría las actividades de la UNRWA en Gaza.
Durante una conferencia de prensa que tuvo lugar poco antes de que la Knéset aprobara la mencionada legislación, Miller destacó que la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos desempeña “un rol crucial en Gaza, siendo la entidad principal en la entrega de ayuda humanitaria a quienes lo requieren. Actualmente no existe ninguna otra organización que pueda reemplazarla en esta crisis”.
Según Miller, “si la UNRWA cesa sus operaciones, los civiles, incluidos menores y bebés, quedarán sin acceso a alimentos, agua y medicamentos esenciales para su supervivencia. Esto es algo inaceptable para nosotros”.
Además, agregó: “Seguimos instando al gobierno de Israel a detener la implementación de esta legislación. Pedimos que no se lleve adelante, y evaluaremos nuestras acciones en función de lo que suceda en los próximos días”.
El vocero de la administración Biden también aludió a una carta enviada por el gobierno estadounidense a Israel a principios de mes, advirtiendo que la aprobación de dicha ley podría generar “implicaciones bajo la ley estadounidense”, en relación con la asistencia de seguridad que Estados Unidos proporciona a Israel.
La legislación estadounidense establece que no se pueden transferir armas ofensivas a naciones que bloqueen la llegada de ayuda humanitaria, y Miller sugirió que obstaculizar el trabajo de la principal agencia encargada de entregar dicha ayuda podría derivar en restricciones a la ayuda de EE. UU. hacia Israel.
En la misma conferencia de prensa, un periodista mencionó que la administración Biden suspendió su financiamiento a la UNRWA tras conocerse que algunos de sus empleados participaron en el ataque terrorista de Hamás del 7 de octubre. Además, el Congreso aprobó una ley que prohíbe restablecer ese financiamiento hasta, al menos, marzo del próximo año.
Miller respondió que el gobierno cree necesario levantar esa prohibición y añadió que la UNRWA está realizando reformas internas importantes.
El portavoz también señaló que la UNRWA ha iniciado sus propias investigaciones en respuesta a las acusaciones israelíes, aunque Israel aún no ha presentado las pruebas requeridas para que la agencia pueda proceder adecuadamente con la investigación. Por ello, Miller pidió a Israel que colabore entregando dichas pruebas.
Además, Miller indicó que, en varios aspectos importantes, la relación entre Israel y la ONU “no es constructiva”, e instó a Israel a cooperar más estrechamente con la organización internacional.
Desde Jerusalén, sin embargo, se ha acusado reiteradamente a las Naciones Unidas de tener un sesgo institucional contra Israel, señalando que el país recibe críticas desproporcionadas en comparación con otras naciones en ese foro internacional.