Los viajeros pueden tener más facilidad para entrar y salir del país ahora que Israel está a punto de unirse al programa de certificado digital COVID de la Unión Europea en cualquier momento, según informó The Jerusalem Post.
Este programa de viajes permitirá a los israelíes vacunados y recuperados viajar a los Estados miembros de la UE y a otros países miembros del programa y que su certificado sea reconocido por el destino. Al mismo tiempo, los viajeros de los países miembros también verán reconocidos sus certificados de vacunación y recuperación en Israel.
El programa también se aplicará a las personas que hayan recibido certificados de recuperación del coronavirus. El Ministerio de Sanidad aún no ha decidido si permitirá participar a las personas con certificados de prueba.
La UE comenzó a utilizar el programa entre los Estados miembros el 1 de julio de 2021. Desde entonces, se ha ampliado a los países vecinos y, para cuando Israel lance oficialmente su adhesión, debería haber entre 35 y 40 estados participantes.
El funcionamiento es el siguiente: El Ministerio de Sanidad tiene su propia clave de firma digital, que se almacena en una base de datos segura en el país. Al mismo tiempo, todos los israelíes vacunados tienen una clave personal pero pública que se les asignó en el momento de la vacunación. Esta clave personal puede verificarse mediante el escaneo de un código QR seguro que puede colocarse en un certificado digital o físico.
El código solo contiene la información clave necesaria, como el nombre, la fecha de nacimiento, la fecha de emisión de la vacuna y cualquier otra información relevante sobre la misma. También contiene un identificador único.
Cuando el código es escaneado, por ejemplo por un funcionario de fronteras, los datos no se comparten y no son capturados, transferidos ni almacenados de ninguna manera por la persona o el país que realiza el escaneo. Por el contrario, permanece en el certificado. Sin embargo, el escáner puede confirmar la validez y autenticidad del certificado y quién lo ha emitido y firmado.
Esto funciona porque la Comisión Europea construyó una “pasarela” a través de la cual todas las firmas de certificados pueden ser verificadas por cualquier país que se una al programa. Israel había estado trabajando en un concepto similar, por lo que modificó ligeramente su propio diseño para cumplir las normas de diseño comunes de la Comisión Europea.
Ya en diciembre de 2020, el Ministerio de Sanidad examinó la posibilidad de un programa de pasaporte o certificado de vacunas estandarizado que pudiera ser utilizado por todos los viajeros internacionales que cumplieran los criterios médicos. En ese momento, la Organización Mundial de la Salud se opuso a dichos certificados, en gran medida porque la organización creía que “el uso de certificados de inmunidad para viajes internacionales en el contexto de la COVID-19 no está actualmente respaldado por pruebas científicas”.
Sin embargo, desde entonces se ha investigado mucho sobre el impacto de la vacunación en el contagio y la propagación de enfermedades, y se entiende que las vacunas, aunque no son infalibles, evitan la propagación de enfermedades.
La OMS, en un informe de diciembre sobre el tema, también citó “aspectos éticos, legales y de derechos humanos relacionados con la privacidad de los datos personales y la confidencialidad médica; la posibilidad de falsificación o de incurrir en conductas de riesgo basadas en una falsa sensación de seguridad; el estigma y la discriminación” como razones para reconsiderar los certificados.
El programa de certificados digitales COVID de la UE aborda en gran medida la mayoría de estos problemas, y la adhesión al programa de la UE aliviaría la necesidad de que Israel creara su propio programa de viajes internacionales.
Israel ha dialogado durante el último año sobre la formación de acuerdos bilaterales con países hasta que puedan establecerse acuerdos multilaterales, como éste. El país también compartió las mejores prácticas y consultó con otros países sobre la mejor manera de llevar a cabo un programa de certificados.
Una fuente cercana a la decisión dijo que la medida representa un “progreso innovador” y es un “paso adelante realmente significativo”.
No obstante, hay que subrayar que el programa no exime de seguir las normas de COVID de cualquier país de destino.
Por ejemplo, los extranjeros que deseen entrar en Israel seguirán teniendo que solicitarlo y cumplir los criterios del país. Los viajeros seguirán teniendo que someterse a una prueba de PCR en las 72 horas siguientes al embarque en el avión y al aterrizar.
Sin embargo, ya no tendrán que verificar su vacunación o recuperación demostrando que tienen anticuerpos mediante una prueba serológica.
La fuente dijo que el Ministerio de Sanidad está trabajando estrechamente con otros ministerios pertinentes para hacer avanzar este programa y otros que facilitarían los viajes en los próximos meses.