Según reportes de medios israelíes, Estados Unidos está colaborando en un esfuerzo diplomático para impedir que la Corte Penal Internacional (CPI) emita órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y otros altos funcionarios.
Esta iniciativa busca proteger a Netanyahu, quien, según el analista Ben Caspit del sitio Walla, se encuentra “bajo un estrés inusual” ante la posibilidad de enfrentar una orden de arresto junto con otros israelíes. Esta situación podría representar un serio deterioro del estatus internacional de Israel.
Caspit detalla que Netanyahu ha emprendido una “campaña telefónica incesante”, centrando esfuerzos en la administración del presidente estadounidense Joe Biden para evitar dichas órdenes.
Paralelamente, Amos Harel de Haaretz informa que el gobierno de Israel opera bajo la suposición de que el fiscal de la CPI, Karim Khan, podría emitir próximamente órdenes de arresto contra figuras clave como el ministro de Defensa, Yoav Gallant, y el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel, Herzi Halevi.
Estados Unidos, al igual que Israel, no es parte de los 124 países firmantes del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, y según Harel, ya está involucrado activamente en los esfuerzos por bloquear estas órdenes de arresto.
En una reciente declaración pública sobre la guerra, Netanyahu comentó que las decisiones futuras de la CPI podrían establecer un “precedente peligroso”.
“Nunca dejaremos de defendernos. Si bien las decisiones de la corte en La Haya no afectarán las acciones de Israel, serían un precedente peligroso que amenazaría a los soldados y funcionarios de cualquier democracia que luchan contra el terrorismo criminal y la agresión”, expresó el viernes.