El ministro de Asuntos Exteriores, Yair Lapid, partió el miércoles por la noche hacia Moscú para una visita relámpago, según informó su oficina.
Se reunirá el jueves con su homólogo ruso, Sergey Lavrov. Los dos darán una rueda de prensa conjunta, según un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores, que no precisó de qué iban a hablar. Lapid también se reunirá con el personal diplomático israelí en la embajada.
La reunión será la primera de Lapid con Lavrov desde que se convirtió en ministro de Asuntos Exteriores en junio.
El viaje se produce tras los recientes informes de tensiones en la relación entre Israel y Rusia sobre las políticas hacia Siria.
La libertad de acción de Israel en Siria se vio seriamente limitada después de que Rusia proporcionara baterías avanzadas de defensa aérea S-300 a las fuerzas del presidente Bashar Assad tras un incidente en 2018 en el que el ejército sirio, apuntando a aviones israelíes, derribó en su lugar un avión ruso, matando a las 15 personas que iban a bordo.
Israel ha llevado a cabo cientos de ataques aéreos dentro de Siria en el curso de la guerra civil del país, apuntando a lo que dice que son presuntos envíos de armas que se cree que están destinados al grupo terrorista libanés Hezbolá, respaldado por Irán, que está luchando junto a las fuerzas gubernamentales sirias. Rara vez reconoce o discute estas operaciones.
Rusia ha llevado a cabo una campaña militar en Siria desde 2015, ayudando al gobierno de Assad a recuperar el control de la mayor parte del país tras una devastadora guerra civil. Moscú también ha ayudado a modernizar los arsenales militares de Siria y a entrenar a su personal.
A primera hora del viernes, la Fuerza Aérea israelí atacó y destruyó una batería de misiles siria que había lanzado un misil que explotó cerca del centro de Israel.