El presidente de Israel, Reuven Rivlin llamó al primer ministro australiano Scott Morrison el miércoles, después de que un tribunal israelí determinara que la presunta delincuente sexual Malka Leifer está en condiciones de ser juzgada.
“El Estado de Israel no permitirá que nadie utilice sus instituciones para evadir la justicia”, dijo Rivlin a Morrison, diciendo que los tribunales lo demostraron.
Leifer es buscada en Australia por 74 cargos de abuso sexual y violación de menores. Ella alegó enfermedad mental desde que se iniciaron los procedimientos de extradición en 2014, pero el tribunal falló en contra de esas alegaciones esta semana. Leifer ha sido declarada apta para la extradición y para ser juzgada en Australia, y su audiencia fue fijada para el 16 de julio.
Los abogados de la acusada por delitos sexuales dijeron que planean apelar tanto la decisión de que está mentalmente apta como la extradición, si se aprueba, ante el Tribunal Superior de Justicia.
Rivlin informó a Morrison del procedimiento.
El presidente visitó Australia en febrero y le dijo a Morrison y al Gobernador General David Hurley que Israel es un país de ley y orden, y que tiene previsto vigilar esta cuestión cuando regrese a Israel.
Morrison agradeció a Rivlin por el llamado, señalando que refleja las fuertes y cálidas relaciones entre Israel y Australia y sus pueblos.
El primer ministro australiano señaló una verdadera sensación de alivio en la comunidad judía de su país.