El embajador ucraniano en Israel, Yevgen Korniychuk, afirma que no se espera que las conversaciones en curso sobre la frontera bielorrusa entre Ucrania y Rusia den sus frutos, y que Ucrania está decepcionada porque Israel sigue negándose a proporcionar los tan necesarios cascos y chalecos militares para la protección militar y civil, informa The Times of Israel.
“Entendemos que las conversaciones en Bielorrusia son otro truco de Putin para aprovechar el tiempo para reestructurar sus fuerzas militares”, dice Korniychuk. “No tiene ninguna reunión seria específica”.
“Pero nuestra delegación decidió participar en ella para no ser acusada de no tomarla en serio”, añade.
De las 100 toneladas de ayuda humanitaria que Israel envió el pasado día a Ucrania, Korniychuk dice que se alegra de recibir los antibióticos y equipos médicos específicos que el Ministerio de Sanidad de su país solicitó, pero que aunque es un buen gesto, gran parte de los equipos enviados -incluidos los sistemas de tratamiento de agua- no son prioritarios.
Además, Korniychuk menciona que numerosos ucranianos sin estatus están actualmente detenidos en el aeropuerto Ben Gurion. Según Korniychuk y un abogado que representa a los refugiados, llegaron a Israel para quedarse con la familia, pero el Estado les pide un depósito de varios miles de shekel para dejarles cruzar la frontera.
“Conocemos decenas de casos”, dice el representante legal.