Asfixiadas bajo el peso de las cuarentenas obligatorias para muchos viajeros, las compañías aéreas de Israel han pedido al Ministerio de Salud que sustituya las cuarentenas por una tercera prueba de Covid-19.
El Mayor General (retirado) Roni Numa, comisario de la crisis del coronavirus en los aeropuertos del país, está a favor de esta propuesta y abierto a otras posibilidades, dijo su portavoz el domingo. Dijo que creía que había una posibilidad razonable de que el gobierno aceptara este compromiso en una reunión con el Ministerio de Sanidad.
A partir del miércoles, los viajeros procedentes de EE.UU., Francia, Italia, Alemania, Grecia y unos 20 países más deberán aislarse durante un mínimo de siete días, incluso si están totalmente vacunados o recuperados, después de que el gobierno pusiera a esos países bajo una severa advertencia de viaje. Esa decisión provocó una “histeria masiva” entre los viajeros, lo que llevó a muchos a cancelar o aplazar sus planes de vuelo, según las agencias de viajes.
La normativa israelí sobre viajes durante la pandemia es una de las más estrictas del mundo, y muchos, incluidos altos profesionales de la salud, han denunciado que no hay justificación científica para exigir a tantos viajeros que se aíslen después de los vuelos. Otros países, como Gran Bretaña, han eliminado en los últimos días los requisitos de cuarentena para los viajeros totalmente vacunados.
El mes de agosto es una época popular de vacaciones, y muchas personas salieron para sus viajes al extranjero antes de que se anunciaran las nuevas restricciones de viaje. El año escolar comienza el 1 de septiembre y Rosh Hashanah empieza la noche del 6 de septiembre, por lo que la perspectiva de estar confinado a una cuarentena de siete días es particularmente frustrante para muchos en esta época del año.
Según el director general de Ziontours Jerusalem, Mark Feldman, varios viajeros han pagado cientos de dólares extra para adelantar su vuelo y aterrizar antes de que las restricciones entren en vigor el miércoles.
En la actualidad, los viajeros deben someterse a pruebas 72 horas antes de embarcar en un vuelo a Israel, y luego de nuevo en el aeropuerto a su llegada, y todos los que proceden de países rojos o naranjas deben permanecer en cuarentena durante siete días, incluso si están totalmente vacunados. El acuerdo propuesto por las aerolíneas añadiría una tercera prueba de COVID al quinto día, con la opción de salir del aislamiento antes de tiempo si ésta es negativa, según el portavoz de Numa.
Las aerolíneas israelíes están sufriendo enormemente durante la pandemia. El Al perdió 531 millones de dólares en 2020 y vio caer sus ingresos en más de un 70% debido a la cancelación de vuelos.
El gobierno se vio obligado a gastar casi 750 millones de NIS para rescatar a El Al e Israir de los daños de meses de vuelos cancelados y cierres de aeropuertos. Como parte de ese plan, El Al debía recaudar otros 105 millones de dólares en una oferta de acciones para julio, pero se pospuso “a la luz de los cambios en el entorno empresarial y la prevalencia de la variante Delta del Covid-19”.
Más cierres o cancelaciones cavarán esos agujeros aún más profundos, y los responsables de las compañías aéreas han advertido que la industria de la aviación del país corre peligro de “colapso”.