Un cese de hostilidades duradero con Hamás en Gaza reduciría los riesgos económicos y financieros para Israel, según un informe de Moody’s Investors Service publicado el martes.
El análisis subraya que el avance en el reciente acuerdo de alto el fuego y la liberación de rehenes en Gaza, vigente desde esta semana, también disminuiría los riesgos de una escalada regional que involucre a Irán. Asimismo, mitigaría los efectos en las cadenas de suministro globales, especialmente en el transporte marítimo en el mar Rojo, afectado por la guerra.

Christian Fang, analista senior de Moody’s, advirtió sobre la necesidad de negociaciones adicionales para lograr un alto el fuego permanente, señalando que las actuales condiciones del acuerdo son limitadas en alcance y duración. Según Fang, obstáculos políticos internos y preocupaciones de seguridad en Israel podrían dificultar el progreso hacia una solución estable.
El acuerdo de tres fases, implementado el domingo por la mañana, puso fin a los enfrentamientos iniciados tras el ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023, que dejó más de 1.200 muertos y 251 rehenes secuestrados en Israel. Este cese temporal ha generado expectativas en el ámbito financiero. Fitch Ratings, a través de su principal analista James LONGdon, destacó que el alto el fuego podría aliviar la presión para rebajas adicionales en la calificación crediticia de Israel.
El año pasado, tanto Fitch como Moody’s redujeron la calificación crediticia de Israel, citando riesgos de escalada en el norte con Hezbolá, lo que podría debilitar aún más la economía y las finanzas públicas del país. Moody’s, en particular, rebajó en septiembre la calificación de A2 a Baa1, aludiendo a la menor capacidad institucional del gobierno israelí para manejar los desafíos financieros y los gastos incrementados durante la guerra.
En la primera fase del acuerdo, Hamás liberó a tres rehenes, mientras Israel excarceló a 90 de los 2.000 terroristas palestinos presos previstos. Cada semana, 30 rehenes más serán liberados hasta completar esta etapa inicial de 42 días. Adicionalmente, Hamás mantiene a 65 personas, algunas de las cuales habrían muerto, cuyo retorno se incluiría en una segunda fase para un alto el fuego permanente.
Fang destacó que, sin una solución duradera, las tensiones regionales seguirán incrementándose. Retomar las hostilidades o enfrentamientos con grupos respaldados por Irán podría reavivar rápidamente los riesgos de escalada en la guerra.