La venta de 1.5 mil millones de acciones de Saudi Aramco, lanzada el domingo, ha atraído una demanda que superó la oferta disponible, según informó Reuters. La demanda sobrepasó la oferta solo unas horas después de que comenzó la venta.
La oferta secundaria de acciones de Aramco atrae alta demanda inicial
La noticia de la oferta secundaria de acciones se dio a conocer la semana pasada, cuando el gobierno de Arabia Saudita anunció que vendería 1.545 mil millones de acciones de Aramco a un precio de entre 26.70 y 29 riyales por acción.
Para cubrir posibles posiciones cortas resultantes de cualquier sobreactuación, el gobierno ha otorgado a Merrill Lynch, que actuó como el gestor estabilizador de la oferta, una opción conocida como “greenshoe” para comprar hasta el 10% del número de acciones ofrecidas al precio final de oferta.
Los bancos siguen recibiendo órdenes de compradores institucionales
Los bancos involucrados en la venta de acciones continuarán recibiendo órdenes de compradores institucionales hasta el jueves, informó Reuters, tras lo cual, el viernes, anunciarán el precio final de la venta de acciones.
Si la demanda continúa tan fuerte, ese precio estará en el extremo superior del rango anunciado. Eso significaría unos $12 mil millones en ingresos, a menos que los bancos que gestionan la oferta no añadan más acciones. En ese caso, según Reuters, los ingresos totales de la oferta podrían alcanzar los $13.1 mil millones.
Sin embargo, los escépticos señalan que incluso los ingresos máximos de la oferta secundaria no irían muy lejos para cumplir con las Visiones 2030 del Reino, un plan integral de diversificación económica encabezado por el gobernante de facto de Arabia Saudita, el Príncipe Heredero Mohammed.
El programa Visión 2030 necesita mayores ingresos para diversificación
El programa Visión 2030 tiene un costo de aproximadamente un billón, en comparación con el cual los $13.1 mil millones que podrían recaudarse con la venta de acciones parecen una cantidad insignificante. El desafío de diversificación para Arabia Saudita se vuelve aún más marcado en el contexto de la última reunión de OPEP+ que resultó en una decisión de extender los recortes de producción.
A pesar de esta decisión, los precios del petróleo bajaron, comprometiendo el esfuerzo del cartel para poner un suelo bajo los puntos de referencia. Esto podría afectar las finanzas del Reino, haciendo aún más crucial el éxito del programa Visión 2030.