Arabia Saudita quiere ser el mayor proveedor mundial de hidrógeno, dijo el domingo el ministro de Energía del país, el príncipe Abdulaziz bin Salman al-Saud.
El mayor exportador de petróleo del mundo pretende producir y exportar alrededor de 4 millones de toneladas de hidrógeno para 2030, añadió el ministro.
El director ejecutivo de Aramco, Amin Nasser, dijo a principios de este año que el productor estatal de petróleo de Arabia Saudita está buscando acuerdos de compra de hidrógeno en sus mercados clave para ampliar su producción y ve un fuerte potencial de crecimiento.
Cada vez son más los llamamientos internacionales para que se reduzca la inversión en combustibles fósiles y se apueste por las fuentes de energía renovables.
El ministro también dijo que el reino tiene previsto fabricar coches eléctricos.
Entre las regiones del mundo, los países del Golfo gozan de excelentes condiciones naturales para la producción de hidrógeno azul y verde. Los EAU cuentan con buenas características naturales para el almacenamiento de CO2, mientras que su elevado potencial de generación de energía solar es la base de un sector de energía solar en expansión que produce electricidad a muy bajo coste.
Además, las excelentes infraestructuras a gran escala del país para apoyar el refinado, la producción petroquímica y el transporte marítimo constituyen una sólida base para la producción y exportación de hidrógeno y productos derivados del hidrógeno. Dada la ubicación del país y el coste relativamente alto del transporte de hidrógeno (en comparación con el GNL, por ejemplo), los autores escriben que los EAU podrían encontrar un destino de exportación en los países del sur de Asia.