El mercado petrolero atraviesa un período complicado, pero la demanda de crudo aún podría ser lo suficientemente fuerte como para propiciar una recuperación de precios.
Factores de la caída
El barril de Brent experimentó una caída de 17 % desde mediados de abril debido al temor a una recesión en Estados Unidos y a una recuperación menos sólida de lo esperado en China. Las compras de crudo por parte de refinerías asiáticas fueron moderadas en abril debido a la disminución de márgenes de producción de combustibles.
Arabia Saudita recortó los precios del petróleo para los procesadores asiáticos en junio, mientras que Rusia mantuvo altos niveles de suministro a pesar de las sanciones por la invasión de Ucrania. Estos factores han generado preocupación en el mercado petrolero y han afectado las perspectivas de recuperación.
El consumo de petróleo parece saludable y podría seguir aumentando en los próximos meses, según UBS Group AG. Además, la oferta es bastante ajustada, según el CEO de Shell Plc, Wael Sawan.
Recuperación del mercado petrolero
Los futuros del Brent comenzaron a recuperar parte de sus pérdidas, con un aumento del 1,9 % el viernes. La fortaleza del mercado se refleja en toda la estructura de precios, con los futuros del Brent para entrega inmediata en una prima sobre los meses posteriores en una curva conocida como backwardation.
China está atrayendo cargamentos de petróleo a medida que sale de sus restrictivas normas COVID, lo que podría impulsar aún más la demanda. El uso mundial de petróleo también sigue en camino de aumentar a un récord de 101,9 millones de barriles diarios, según la Agencia Internacional de la Energía en París.
Intervención de la OPEP+
En caso de deterioro de los fundamentos, es probable que Arabia Saudita y sus colegas de la OPEP+ intervengan más para apuntalar los precios, según varios analistas. “Los recortes de la OPEP deberían ayudar a mitigar” el escenario bajista del mercado, dijo Christyan Malek, jefe de estrategia energética de JPMorgan Chase & Co.
El desplome del crudo ha sido una luz de alarma para la OPEP y sus socios, quienes se reunirán en persona en su próxima reunión mensual para analizar en detalle las tendencias del mercado.