El otrora próspero sector petrolero ecuatoriano experimenta un declive pronunciado, con la producción de petróleo en su nivel más bajo desde 2003 y afectando negativamente a la economía nacional.
Caída del oro negro: Impacto económico
En la década de 2005 a 2015, la riqueza petrolera permitió a Ecuador, liderado por el presidente Rafael Correa, aliviar la pobreza y aumentar las inversiones sociales. Sin embargo, el colapso de los precios del petróleo y la disminución de la inversión extranjera han causado una caída significativa en los ingresos petroleros.
Este cambio ha repercutido negativamente en el estado económico del país, anteriormente impulsado por la industria petrolera, con la producción petrolera disminuyendo constantemente desde 2014.
Las dificultades del sector se ven reflejadas en las cifras de julio de 2023, que indican que la producción de petróleo ha caído un 8 % respecto al año anterior, con una producción media de 452.603 barriles diarios.
Factores que contribuyen al declive petrolero
Una serie de factores están contribuyendo a esta crisis petrolera, que incluyen la corrupción, las protestas contra la industria, las infraestructuras en mal estado y la disminución de la inversión extranjera en energía.
La situación ha llevado al gobierno del presidente Guillermo Lasso a reducir el objetivo de producción diaria anual para 2023 en un 8 %, lo que equivale a una disminución de 40.000 barriles por día.
Los recientes disturbios civiles y la crisis política en curso en Ecuador sugieren que incluso este objetivo revisado podría ser inalcanzable.
Consecuencias de la interrupción de la producción
En febrero de 2023, el cierre del oleoducto SOTE, propiedad de Petroecuador, y del oleoducto OCP, controlado por el sector privado, llevó a una disminución drástica en la producción de petróleo y a la suspensión de las exportaciones.
Las protestas de las comunidades indígenas también han afectado la producción de petróleo, especialmente en la provincia de Orellana, lo que llevó a Petroecuador a declarar fuerza mayor para cuatro bloques petroleros.
Estos factores contribuyeron a una caída intermensual de casi el 10 % en la producción de petróleo en marzo de 2023.
Continuos riesgos para la producción petrolera
Los problemas técnicos y las protestas siguen amenazando la producción petrolera en la región amazónica. Los fallos en los oleoductos SOTE y OCP en 2020 ocasionaron uno de los derrames de petróleo más graves en años recientes en Ecuador.
Este derrame, que contaminó el río Coca y afectó el río Napo, afluente del Amazonas, pone de manifiesto los riesgos medioambientales asociados a la industria petrolera en la región.
Daño Ecológico y Desafíos Infraestructurales en la Amazonía Ecuatoriana
El SOTE, oleoducto vital para el país, ha sufrido otra fuga cerca de Nueva Loja, en la Amazonía, con derrames en los ríos San Miguel y Conejo. Estos incidentes, que superan el millar, han causado estragos ecológicos en la región. Petroecuador ha enfrentado críticas por la limpieza insuficiente de estos vertidos.
El aumento de la erosión del río Coca, acelerado tras la construcción de la presa Coca Codo Sinclair en 2016, ha sido identificado como el principal responsable de estas rupturas de oleoductos.
Además, las propuestas gubernamentales para actualizar la infraestructura petrolera, incluyendo los oleoductos SOTE y OCP, y la refinería de Esmeraldas, están en espera debido a la crisis política actual.
Escándalos Políticos y Parálisis de Actividades Petroleras
El presidente Lasso se enfrenta a problemas políticos graves, incluyendo intentos de destitución y la disolución de la legislatura. Esto ha llevado a la paralización de las actividades de exploración y producción de petróleo, en medio de protestas nacionales contra el costo de vida.
La inestabilidad política de Ecuador, agravada por la violencia en las ciudades portuarias de Guayaquil y Esmeraldas, también está afectando al sector petrolero.
Incremento de Violencia Ligada al Narcotráfico
La violencia en Ecuador se ha intensificado debido al aumento del tráfico de cocaína, convirtiendo al país en un importante punto de transbordo entre Colombia y Perú, los principales productores de cocaína del mundo.
El establecimiento de cárteles y grupos de delincuencia organizada en Ecuador ha llevado a un fuerte incremento de la tasa de homicidios, afectando también la inversión extranjera, especialmente en el sector de los hidrocarburos.
Efecto sobre la Economía Ecuatoriana
El petróleo es esencial para la economía ecuatoriana, representando un porcentaje significativo del PIB y de los ingresos públicos. La creciente crisis petrolera amenaza con desestabilizar aún más una economía ya debilitada.
Con los recientes desafíos y la deuda creciente, Ecuador podría enfrentar una nueva crisis económica, que profundizaría las dificultades de una población aún recuperándose de la pandemia.