LONDRES – El gigante energético Shell dice que dejará de comprar petróleo y gas natural ruso y cerrará sus estaciones de servicio, combustibles de aviación y otras operaciones en el país, en medio de la presión internacional para que las empresas rompan sus vínculos por la invasión de Ucrania.
La compañía dice en un comunicado que se retirará de todos los hidrocarburos rusos, incluyendo el petróleo crudo, los productos petrolíferos, el gas natural y el gas natural licuado, “de forma gradual”.
La decisión se produce pocos días después de que el ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania criticara a Shell por seguir comprando petróleo ruso, arremetiendo contra la compañía por seguir haciendo negocios con el gobierno del presidente Vladimir Putin.
“Somos muy conscientes de que nuestra decisión de la semana pasada de comprar un cargamento de crudo ruso para refinarlo en productos como la gasolina y el gasóleo -a pesar de haber sido tomada teniendo en cuenta la seguridad de los suministros- no fue la correcta y lo lamentamos”, afirma el consejero delegado Ben van Beurden. “Como ya hemos dicho, destinaremos los beneficios de las limitadas cantidades restantes de petróleo ruso que procesaremos a un fondo específico”.