Fitch Ratings reafirmó el jueves la calificación A+ de Israel con perspectiva estable, citando sus “fuertes finanzas externas y su sólida fortaleza institucional”.
La agencia de calificación crediticia también señaló la relación relativamente alta entre la deuda pública y el PIB de Israel y los riesgos de seguridad.
La economía de Israel se contrajo un 2,6% el año pasado debido a la pandemia, pero se espera que crezca un 5,1% este año y un 5,7% en 2022. La economía resistió relativamente bien el impacto de la pandemia gracias a las industrias de alta tecnología de Israel y a la exitosa campaña de vacunación, según el informe.
La agencia predijo que el déficit presupuestario de Israel disminuirá del 11,6% del PIB en 2020 al 7% en 2021, a medida que la economía se recupere de lo peor de la pandemia, las medidas de apoyo del gobierno retrocedan y el sector de alta tecnología continúe con su buen desempeño.
Fitch dijo que espera que el gobierno apruebe un presupuesto, el primero tras más de dos años de estancamiento político, que estabilizará aún más los niveles de deuda. Prevé un déficit presupuestario de alrededor del 3% en 2023, después de que finalicen todas las medidas de apoyo a la pandemia.
El informe señalaba los riesgos fiscales, como la escasa mayoría de la coalición gubernamental en la Knesset, la diversidad de sus miembros, y los riesgos de seguridad, como la inestabilidad en Siria, las tensiones con Irán y la posible violencia con el grupo terrorista Hezbolá, respaldado por Irán, en Líbano.
Los enfrentamientos entre Israel y Hamás en primavera no tuvieron un efecto adverso significativo en la economía de Israel, aunque los combates pusieron de manifiesto las divisiones étnicas dentro de Israel, según el informe.
Queda por ver si los Acuerdos de Abraham, que formalizaron las relaciones entre Israel y los Emiratos Árabes Unidos, Bahrein y Sudán, disminuirán los riesgos geopolíticos a los que se enfrenta Israel. Los beneficios económicos, por su parte, “probablemente serán limitados dado el modesto tamaño de sus economías en comparación con los socios comerciales existentes”.
Fitch dijo que espera que los principales bancos israelíes sigan siendo duraderos a pesar de algunas tensiones causadas por la pandemia, y que los descensos de los ingresos netos en Israel el año pasado fueron menos graves que en los países de su entorno.
El informe da por sentado que los conflictos regionales continuarán, que Israel no logrará ningún avance significativo en materia de paz con los palestinos y que no se producirá un deterioro grave de la seguridad interna de Israel.
La calificación A+ no es la más alta de Fitch; la escala de la agencia va de la AAA a la D. Una calificación “A” denota una alta calidad crediticia con bajo riesgo de impago y una fuerte capacidad para pagar los compromisos financieros, pero cierta vulnerabilidad a las condiciones empresariales o económicas adversas.
Fitch, con sede en Nueva York y Londres, está considerada una de las tres principales agencias de calificación crediticia, junto con Moody’s y Standard & Poor’s.