Israel ha confiscado alrededor de 190 cuentas de criptomonedas en Binance, incluyendo algunas vinculadas al Estado Islámico y a Hamas, según documentos publicados por las autoridades antiterroristas del país.
Acciones contra el financiamiento del terrorismo
El Buró Nacional de Israel para el Financiamiento Antiterrorista (NBCTF) ha incautado cuentas en Binance, el mayor intercambio de criptomonedas del mundo, con el objetivo de “frustrar la actividad” del Estado Islámico y “debilitar su capacidad para avanzar en sus objetivos”.
Si bien no se proporcionaron detalles sobre el valor de las criptomonedas incautadas, estas acciones destacan el enfoque de los gobiernos en empresas de criptomonedas para prevenir actividades ilegales.
La mayoría de las cuentas confiscadas pertenecen a tres empresas palestinas de intercambio de divisas designadas por Israel como “organizaciones terroristas” por su presunta implicación en la transferencia de fondos para Hamas, que controla la Franja de Gaza.
Reacciones y cooperación con autoridades
Binance, fundada en 2017 por el CEO Changpeng Zhao, afirma en su sitio web que revisa las solicitudes de información de gobiernos y agencias de aplicación de la ley caso por caso, proporcionando información según lo requieran legalmente.
La plataforma también asegura que verifica a los usuarios por conexiones con el terrorismo y ha invertido recursos en mejorar su programa de cumplimiento, según una carta enviada a senadores estadounidenses en marzo.
Por su parte, Hamas negó tener vínculos con las empresas de intercambio de divisas y acusó a Israel de intentar “justificar su guerra económica contra Gaza y su pueblo”.
Acciones legales en curso
Además de enfrentar acciones civiles por parte de la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas de EE. UU. (CFTC) por “evasión intencional” de las leyes estadounidenses, Binance también ha sido objeto de investigaciones que alegan la falta de controles efectivos contra el lavado de dinero.
El CEO de Binance, Zhao, ha calificado los cargos como una “exposición incompleta de los hechos” y la plataforma ha disputado cálculos inexactos y descripciones “obsoletas” de sus controles de cumplimiento en artículos periodísticos.
Estado Islámico y criptomonedas
El Estado Islámico, que surgió en Siria después de la guerra civil en Irak, ha utilizado criptomonedas para financiar sus actividades. El Departamento del Tesoro de EE. UU. informó el año pasado que el grupo había recibido donaciones en criptomonedas que luego convertía en efectivo a través de plataformas de comercio de criptomonedas, aunque no especificó cuáles.
En respuesta a estas preocupaciones, reguladores de todo el mundo han pedido controles más estrictos en los intercambios de criptomonedas para prevenir actividades ilegales, como el lavado de dinero y la financiación del terrorismo.
Cooperación internacional en la lucha contra el financiamiento del terrorismo
En un caso relacionado con un ataque en Viena en 2020, en el que murieron cuatro personas y que posteriormente fue reivindicado por el Estado Islámico, la policía alemana señaló que dos hombres sospechosos de ayudar al atacante habían utilizado Binance. La plataforma compartió información con las autoridades policiales, según afirmaron sus representantes legales el año pasado.
Estos casos ilustran la necesidad de una mayor cooperación entre las empresas de criptomonedas y las autoridades gubernamentales para luchar de manera efectiva contra el financiamiento del terrorismo y otras actividades ilícitas en el ámbito de las criptomonedas.
El futuro de las criptomonedas y la seguridad global
A medida que las criptomonedas continúan ganando popularidad y se integran cada vez más en la economía global, es crucial que los gobiernos, los reguladores y las empresas de criptomonedas trabajen juntos para garantizar que estas tecnologías no sean explotadas por actores malignos.
El fortalecimiento de los controles de cumplimiento, la adopción de medidas preventivas y la cooperación internacional en la lucha contra el financiamiento del terrorismo y otras actividades ilegales son esenciales para garantizar que las criptomonedas sigan siendo una herramienta segura y prometedora en el ámbito financiero global.