En un intento por romper el monopolio de El Al en la ruta a América del Norte, Israir y Arkia han comenzado conversaciones preliminares para lanzar vuelos hacia esa región. Actualmente, las aerolíneas estadounidenses han dejado de operar hacia Israel, lo que ha provocado una fuerte falta de disponibilidad de asientos y precios elevados.
“Estamos en negociaciones con Israir y Arkia, trabajando para que El Al no sea la única aerolínea que opere hacia América del Norte”, declaró una portavoz del Ministerio de Transporte al medio The Times of Israel.
Tras el estallido de la guerra con el grupo terrorista Hamás luego del ataque del 7 de octubre, las aerolíneas extranjeras han suspendido sus vuelos de manera intermitente. En los últimos meses, las aerolíneas de Estados Unidos han cesado completamente sus operaciones hacia Israel debido al aumento de las tensiones en Oriente Medio y los enfrentamientos en la frontera con el Líbano.
Como resultado, El Al ha quedado como la única aerolínea operando vuelos directos desde Tel Aviv hacia América del Norte, cancelando vuelos solo cuando el aeropuerto Ben Gurion cierra. La falta de competencia ha generado escasez de asientos y precios exorbitantes.
Israir y Arkia buscan superar obstáculos regulatorios y operativos
Para que Israir y Arkia puedan operar vuelos transatlánticos, deben superar varios desafíos operativos. El lanzamiento de estas rutas depende de cumplir con las regulaciones de la Autoridad de Aviación Civil y obtener las aprobaciones necesarias de las autoridades estadounidenses.
Además, ambas aerolíneas necesitarán un socio o un operador para alquilar aviones de fuselaje ancho y tripulaciones, ya que actualmente no cuentan con este tipo de aeronaves. Otro reto significativo será la pernoctación de las tripulaciones en Estados Unidos e Israel.
El temor a pasar la noche en Tel Aviv, debido a la situación de seguridad, sigue siendo uno de los principales obstáculos para que las aerolíneas extranjeras reanuden sus vuelos hacia Israel.
“Bajo la dirección de la ministra de Transporte, Miri Regev, y con la colaboración del Ministerio de Asuntos Exteriores, estamos trabajando para obtener las aprobaciones necesarias del gobierno de Estados Unidos”, aseguró el Ministerio de Transporte.
Modificaciones en la ley de compensaciones podrían incentivar vuelos
Israir y Arkia también esperan que el gobierno tome una decisión respecto a posibles cambios en la ley que obliga a las aerolíneas a compensar a los pasajeros por vuelos cancelados debido a la guerra. Esto reduciría el riesgo financiero y facilitaría la operación de rutas a Estados Unidos.
A principios de este mes, un grupo de 15 aerolíneas extranjeras presentó una solicitud al Comité de Asuntos Económicos de la Knéset para modificar temporalmente la Ley de Servicios de Aviación de 2012, que regula las compensaciones por vuelos cancelados.
Varias aerolíneas han tenido que enfrentar demandas colectivas y reclamaciones de pasajeros exigiendo compensaciones según esta ley, lo que ha dificultado sus operaciones.
El grupo, que incluye aerolíneas estadounidenses y europeas, propone modificar temporalmente la ley para limitar el costo de proporcionar vuelos alternativos, reduciendo así los gastos relacionados con la cancelación de vuelos.
Las aerolíneas estadounidenses extienden la suspensión de vuelos
American Airlines ha extendido la suspensión de vuelos a Tel Aviv hasta septiembre de 2025, luego de que Israel intensificara su respuesta a los ataques con cohetes y aviones no tripulados. Mientras tanto, Delta Airlines ha cancelado sus vuelos a Israel hasta abril del próximo año.
Otras aerolíneas extranjeras, como United Airlines, han decidido suspender sus vuelos indefinidamente debido a preocupaciones de seguridad. United planea reanudar operaciones cuando la situación en Israel sea considerada segura para su tripulación y pasajeros.
Ante esta situación, un grupo de empresarios e inversores tecnológicos está impulsando la creación de una aerolínea estacional para reforzar la ruta entre Tel Aviv y Nueva York a partir de enero, con operaciones mínimas hasta marzo.
La falta de vuelos ha impactado negativamente a los empresarios que dependen de viajes frecuentes a Estados Unidos para reunirse con inversores y clientes, generando grandes trastornos en sus negocios.