La guerra eleva la ratio deuda:PIB de Israel al 62,1% en 2023, superando las expectativas y alterando las previsiones económicas.
La economía israelí enfrenta un revés tras la reciente guerra, con un aumento significativo en su ratio deuda:PIB. Contrariamente a las expectativas del Ministerio de Finanzas de Israel, que anticipaba una reducción de esta ratio del 60,5% al 59,5% para finales de 2023, la realidad pinta un escenario menos alentador. Según el contable general Yali Rothenberg, la ratio ahora se estima que aumentará al 62,1%.
Aunque esta cifra es ligeramente mejor que la proyección de los analistas, que anticipaban un 63%, refleja solo el impacto inicial de la guerra en la economía del país. Se espera que la relación deuda/PIB de Israel continúe su escalada en 2024, generando incertidumbre en los mercados y preocupación en las agencias de calificación sobre el límite de este incremento.
Para revertir la tendencia de aumento de la deuda, es crucial reducir el déficit fiscal del actual 4,2% al 3%. Sin embargo, el presupuesto revisado para 2024 indica un incremento del déficit al 6,6%, postergando cualquier expectativa de recuperación hasta 2025 en el mejor de los casos.
Cabe recordar que durante el pico de la pandemia de Covid-19, la ratio deuda:PIB de Israel sufrió un salto del 58,8% en 2019 al 70,7% en 2020. A pesar de las circunstancias actuales, el Contable General mantiene una perspectiva ligeramente optimista, creyendo que la ratio no alcanzará el 70% antes de que comience a disminuir.
La deuda total de Israel al finalizar 2023 se situó en 1,12 billones de NIS, experimentando un aumento desde los 1,03 billones de NIS de finales de 2022. De este incremento, unos 90.000 millones de NIS se atribuyen directamente a las consecuencias económicas de la guerra.